El Gobierno independiente pretende a toda costa justificar el regreso del control vehicular a los automovilistas, sin regularizar las pedreras y la industria como lo prometió el gobernador Jaime Rodríguez en su primer informe de labores.
La Secretaría de Desarrollo Sustentable, a cargo de Roberto Russildi Montellano, alista un plan para combatir la contaminación, que en los últimos dos meses ha llegado a 150 puntos IMECA.
Pero en la lógica del funcionario estatal no está verificar la contaminación generada por la industria cementera, sino que plantea culpar a los vehículos.
Jesús Padilla