Quizá empujado por dos libros que contienen escandalosas alegaciones de corrupción en el Vaticano, el Papa Francisco anunció ayer la creación de un panel de auditoría que realizará una investigación sin precedentes de las instituciones financieras de la Santa Sede.
El panel, formado a sugerencia del cardenal australiano George Pell, reunirá a las secretarías de Economía y de Estado del Vaticano, junto con el Banco del Vaticano y otras agencias.
Rolando Hinojosa