Después de dos meses de haber concluido el histórico documento, diputados de la Asamblea  Constituyente se reencontraron en la casona de Xicoténcatl para emprender la defensa legal de la primera Constitución de la Ciudad de México, impugnada por el Gobierno de la República.

Con la convicción de ganar la batalla a “quienes pretenden regresar al pasado”, Alejandro Encinas en calidad de presidente convocó a los Constituyentes para trazar la ruta que de manera paralela emprendió el gobierno capitalino a través de la Consejería Jurídico y un grupo de especialistas.

Pese a las renuncias, las ausencias y cientos de transitorios sin discutir a fondo, en 24 horas se cierra uno de los capítulos históricos de la capital: la Constitución de la Ciudad de México.

La consigna de los últimos días fue sacar a toda costa el articulado pendiente para que este 31 de enero la Asamblea Constituyente cumpliera el plazo de entrega en medio de críticas que acusan la falta de profundidad en algunos temas.

Plusvalía, prostitución y legalización de la mariguana fueron los temas más polémicos durante la etapa de dictaminación de las comisiones de la Asamblea Constituyente que concluyó este fin de semana.

Se espera que el próximo lunes inicie la discusión, uno por uno, de los artículos del proyecto de la nueva Constitución del CDMX, las iniciativas presentadas y las reservas incluidas en los dictámenes.

El debate se realizará a contrarreloj: el 31 de enero a más tardar debe de estar aprobada la Carta Magna de los capitalinos.

Los derechos sociales serán la médula de la propuesta de Constitución de la Ciudad de México que el jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera presentará en unas semanas a la Asamblea Constituyente.

El documento “Proyecto para la Constitución de la Ciudad de México: Derechos Sociales”, elaborado por la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) como propuesta al grupo redactor, destaca el interés de que la Carta Magna capitalina se distinga por la justicia social y disminuir la pobreza.

Lo que se anunció como una reunión para conocer los avances del proyecto de Constitución Política de la Ciudad de México terminó en la exigencia de conocer el “borrador” antes de que se integre la Asamblea Constituyente el próximo 15 de septiembre.