El asesinato de albinos está en aumento en Malaui, lo que tiene preocupados a las autoridades y a grupos de derechos humanos como Amnistía Internacional (AI).
Las personas con albinismo suelen ser abatidas y desmembradas debido a la creencia popular de que los practicantes de la brujería pueden convertir sus cuerpos en brebajes capaces de conferir fortuna y salud.