La constante caída en las últimas semanas del precio del petróleo amenaza a las finanzas públicas de la federación.
La realidad internacional se impone a los buenos deseos de los legisladores mexicanos.
Una tercera parte de los ingresos del Gobierno Federal provienen de la renta petrolera. Es por eso que tanto la Ley de Ingresos como el Presupuesto de Egresos dependen de las estimaciones económicas en torno al crudo.
Alejandro Dabdoub