Cuando el cine nos enfrenta a situaciones cotidianas, momentos de una existencia latente, nos convertimos en prisioneros de la ficción aunque solo esté en la pantalla.
La fábrica de sueños también puede materializar las pesadillas.
Con la llegada de “Sicario: Tierra de nadie”, el público se confrontará a la realidad de México y sus ciudades conflictivas al límite de Estados Unidos, ya que en la trama los personajes viven en carne propia la lucha del empoderamiento del crimen organizado y su filtración en las esferas de la seguridad pública fronteriza.
Hidalgo Neira