Como una alternativa natural y biodegradable al plástico, científicos diseñaron un envoltorio de seda para alimentos parecido a la película plástica, que puede preservar fruta por más de una semana.
Un equipo de ingenieros biomédicos de la Universidad de Tufts, en Estados Unidos, desarrollaron una técnica que permite cubrir alimentos con una capa casi invisible de fibroína, una proteína que se encuentra en la seda.