Si no pueden, renuncien

El gobierno de Miguel Ángel Mancera sigue sin poder garantizar la seguridad de los ciudadanos de Distrito Federal.

Ayer fue asaltado el periodista Pepe Cárdenas en la avenida Palmas, a plena luz del día y frente a cientos de testigos. 

Según lo denunció el propio Cárdenas, los delincuentes le quitaron su reloj y su computadora a la altura del conocido Templo de Covadonga.

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El gobierno de Miguel Ángel Mancera sigue sin poder garantizar la seguridad de los ciudadanos de Distrito Federal.

Ayer fue asaltado el periodista Pepe Cárdenas en la avenida Palmas, a plena luz del día y frente a cientos de testigos. 

Según lo denunció el propio Cárdenas, los delincuentes le quitaron su reloj y su computadora a la altura del conocido Templo de Covadonga.

Aprovechando el congestionamiento y la falta de vigilancia policiaca, los delincuentes armados se aproximaron al auto en el que se desplazaba Cárdenas y pistola en mano le quitaron su reloj y su computadora. 

Ante la manifiesta ineptitud del Gobierno del Distrito Federal para garantizar la seguridad de sus ciudadanos, se antoja decir, si no es que gritar, la frase que hizo famoso a Alejando Martí. 

Señores: “Si no pueden, renuncien”. 

Reaparece Mireles

Ayer reapareció el legendario doctor José Manuel Mireles al frente de 600 hombres que portaban armas de alto poder. 

El Ejército Mireles, que se transportó en 60 camionetas, tomó el control de la tenencia de La Mira, para catear domicilios sin tener ninguna facultad legal para hacerlo. 

Mireles volvió a salir con el cuento de que el comisionado presidencial Alfredo Castillo lo traicionó y de que al llegar a La Mira se encontró de pura casualidad tres casas repletas de armas de alto poder que dejaron olvidadas Los Caballeros Templarios. 

Agarrón con manos de seda 

Vaya usted a saber en qué vaya a terminar el conflicto entre el diputado panista Héctor Saúl Téllez, del PAN, y el diputado perredista Adrián Michel Espino, quien fuera oficial mayor del gobierno de Marcelo Ebrard. 

Por una parte, el panista Téllez acusó a Michel de haber hecho negocios inconfesables con la empresa española CAF, fabricante de los trenes.

Por la otra, Adrián Michel, alineado con Marcelo Ebrard, acusó a Téllez de haber hecho tratos semejantes con la compañía Bombardier. 

Eso sí, ninguno de los dos presentó pruebas contundentes de su acusación. 

Para acabar de complicar la situación, un grupo de abogados se apersonó ayer en las oficinas de la Procuraduría General de la Republica para presentar una denuncia penal en contra de Marcelo Ebrard. 

Los denunciantes son Roberto Alcántara Plata, representante del Colegio de Profesionales de Derecho, y Miguel Ángel Barragán, como representante de la fundación Manos de Seda, A.C.

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