En el PRD nadie entiende qué se traen Jesús Zambrano y su pupilo Luis Cházaro. El dirigente nacional perredista ya cargaba en hombros al actor y magnate Roberto Palazuelos, lo placeaba y le extendía las alfombras negro- “amarelas” para que se concretara el acuerdo de ser candidato de coalición a gobernador por Quintana Roo. Sin embargo, de repente salió la diputada Laura Fernández Piña con la graciosa huida del Partido Verde para sumarse a la bancada perredista y ser la aspirante a la gubernatura del mismo estado. Ahí está la mano de Cházaro, coordinador del Sol Azteca en San Lázaro. Nos dicen que así anda Zambrano, de disperso e indeciso, desde un reciente desencuentro con Jesús Ortega.
Con los días contados
Nos cuentan que, después de qué se han revelado diversos contratos irregulares durante la primera Legislatura del Congreso de la Ciudad de México, como los de los artículos de cafetería y otros de tecnología, el oficial mayor, Reynaldo Baños Lozada tiene los días contados. Sin embargo, dicen, su salida no se da por desobedecer a la mayoría, sino porque se revelaron las irregularidades que el partido quería ocultar en los contratos y alguien tiene que cargar con los platos rotos. Ahora la duda es: ¿quién será el nuevo oficial mayor y qué partido lo pondrá? Y es que el PAN podría meter presión para colocar un perfil ahí. Atentos.
Freno esperado
A pesar del “entusiasmo” de la Secretaría de Educación Pública, y en general del Gobierno federal, por impulsar el regreso a clases de forma presencial, parece que la variante Ómicron le va a poner un freno a la estrategia, y aunque la dependencia encabezada por Delfina Gómez no ha cambiado la directriz, los gobiernos en estados como Sinaloa, Tamaulipas o Nayarit ya suspendieron o pospusieron el retorno a las aulas, y por lo visto, la lista de entidades que regresan a las aulas virtuales va a ir en aumento ante el disparo en los contagios.
