Los retos de Nicholas Burns, el nuevo embajador de EU en China

Con la llegada de Nicholas Burns a China, el diplomático estadounidense está a días de comenzar sus tareas como embajador con diferentes retos, como en lo comercial y de derechos humanos, sumándose las sanciones a Rusia por el conflicto en Ucrania; rubros que se espera pueda enfrentar gracias a sus años de experiencia
Fernanda Muñoz Fernanda Muñoz Publicado el
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Estados Unidos tiene a un nuevo diplomático: Nicholas Burns, nombrado el más reciente embajador en China.

Actualmente, el estadounidense ya se encuentra en Beijing, pero no comenzará sus labores de manera oficial sino hasta que haya cumplido con un confinamiento de tres semanas, respetando las reglas sanitarias del Estado asiático.

Con Burns, la Unión Americana vuelve a tener a un embajador en China desde el periodo de Terry Branstad, quien dejó su cargo en 2020 por las tensiones que había bilateralmente en materia comercial.

Durante el gobierno del expresidente Donald Trump, Estados Unidos agudizó su relación con China como no se había visto en años anteriores, luego de imponer aranceles a diversos productos chinos, vetando también a empresas de tecnología como Huawei, bajo el argumento de que ayudaban al gobierno del líder Xi-Jinping en sus tareas de espionaje.

Y aunque con la salida del republicano, el nuevo mandatario, Joe Biden, disminuyó gran parte de esa escalada comercial, los lazos siguen tensos, en espera de que sean controlados por el nuevo diplomático.

En ese sentido, entre los retos que deberá abordar Burns está la interacción comercial de los países más poderosos en materia económica, seguido de la defensa de los derechos humanos, a lo que Estados Unidos se ha posicionado en más de una ocasión.

En diciembre del año pasado, por ejemplo, Joe Biden concretó una ley que prohíbe la importación de productos procedentes de Sinkiang, al noroeste de China, por ser hechos bajo el trabajo forzado, y por violar los derechos humanos de la minoría musulmana en esa región.

Así también, la Unión Americana se ha manifestado contra la Ley de Seguridad Nacional, implementada en 2020, bajo la cual se castiga cualquier expresión antigubernamental, llevando a los opositores a prisión.

Por otro lado, Nicholas Burns tratará de velar por Taiwán, pues mientras el gobierno chino lo contempla como parte de su soberanía, Estados Unidos está a favor de su independencia.

“Por si fuera poco, ahora la guerra en Ucrania también va a ser otro factor de tensión entre ambos países, y un reto para Burns, porque China no ha cedido a las acciones de Occidente de establecer sanciones económicas a Rusia”, agrega el maestro César Soto Morales, especialista en política de Asia e internacionalista de la UNAM.

Respecto al tema, el presidente Xi-Jinping no ha hecho más que hacer un llamado para realizar una “contención máxima” en Ucrania, mas no se ha enfrentado a su aliado de Moscú, Vladimir Putin, en materia económica como lo han hecho otras naciones.

Ante esos retos, el especialista Soto Morales considera que la tarea de Burns sin duda será difícil de llevar a cabo, tomando en cuenta que la relación entre China y Estados Unidos ha sido complicada desde el nacimiento del Estado asiático; sin embargo, se espera que la experiencia del embajador lo pueda respaldar.

La apuesta de Estados Unidos con Nicholas Burns

El 16 de diciembre pasado fue cuando el Senado norteamericano aprobó la nominación de Nicholas Burns como embajador de China, 75 votos contra 18, remarcando el servicio de más de 20 años que le ha dado al gobierno federal.

Antes de dar clases en la Universidad de Harvard, Burns fue embajador ante la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), además de que fue el principal negociador estadounidense en el programa nuclear con Irán, y director de asuntos soviéticos en la administración del expresidente George H.W. Bush, entre otros cargos.

Bajo esa línea, el doctor Roberto Hernández, internacionalista de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán, opina que la elección de Burns para arribar a China fue sin duda una buena apuesta del gobierno de Joe Biden.

“Creo que es una buena carta diplomática de Estados Unidos. Es un funcionario y académico reconocido, un estudioso de las Relaciones Internacionales, y un hombre con mucha experiencia (…) A juzgar por su perfil, nos damos cuenta la importancia que le está dando Estados Unidos a su relación con el gigante asiático”, dice Hernández.

Con esa perspectiva, el maestro César Soto Morales espera que Nicholas Burns no llegue presionando a China para que instale nuevas sanciones a Rusia por el tema de Ucrania, ni respecto a los derechos humanos, pues eso podría dañar aún más la relación.

“El principal contacto entre estos países es lo comercial; entonces, creo que Burns debería darle mayor importancia a esa cuestión; sin embargo, ya veremos con qué tema empieza a actuar, porque eso nos hará entender cómo irá la relación al menos en el corto plazo”, sostiene el especialista.

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