Los ataques terroristas del pasado 13 de noviembre en París dejaron 137 muertos y 415 heridos.
La legendaria sala de conciertos El Bataclán, donde varios atacantes abrieron fuego contra el público que asistía a un concierto de rock, fue el sitio donde se presentó el mayor número de víctimas.
También hubo explosiones y decesos afuera del Estadio Nacional de futbol, en el suburbio parisino de Saint Denis.
Estas explosiones sucedieron cuando François Hollande y miles de espectadores presenciaban un partido de futbol amistoso entre Francia y Alemania.