
Después de 15 años los demonios se despiertan para oscurecer aún más el caso del arraigo de los cuatro militares presuntamente vinculados con el narcotráfico.
La esposa y el hijo del general encarcelado Jesús Gutiérrez Rebollo rompieron el silencio para señalar a Tomás Ángeles Dauahare como responsable de amenazarlos y obligarlos a callarse.
Todo a partir de la acusación hecha al general de brindar protección a Amado Carrillo Fuentes, “El señor de los cielos”.