Sin agenda legislativa, con divisiones políticas y señalamientos de un manejo discrecional de las prerrogativas, arranca hoy el antepenúltimo periodo ordinario de sesiones de la VI Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF).

Por esa razón no hay claridad en cuáles serán los temas que se pretenden discutir en las sesiones ordinarias de este órgano colegiado, comprendidas entre el 13 de marzo y el 29 de abril de 2014.

A dos meses de la unción de Perla Gómez como ombudsgirl de la Ciudad de México, la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) parece estar convertida en una extensión más de las tribus perredistas…

Y es que los puestos de mayor importancia dentro de esta institución están ocupados por personajes ligados al líder de la corriente Izquierda Democrática Nacional (IDN), René Bejarano, y al secretario de Gobierno, Héctor Serrano.

La Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) es onerosa y poco efectiva. Este año ha gastado más de 8 millones de pesos en foros, conferencias, eventos culturales, publicaciones y reuniones de trabajo, que no se traducen en leyes.

De acuerdo con un informe del presupuesto ejercido por las 36 comisiones y 9 comités que integran este órgano legislativo, de enero a octubre del 2013 se han realizado más de 160 actos cuya intención es mejorar el marco legal.

A los diputados locales les llegó “su navidad” 3 meses antes. Este fin de año se repartirán ¬-adicional a sus dietas y prerrogativas ordinarias- una jugosa partida  de más de 100 millones de pesos.

¿De dónde saldrán estos recursos?... la respuesta es sencilla: del saldo que dejó el Fideicomiso denominado “Fondo de apoyo a la Educación y al Empleo de las y los jóvenes del Distrito Federal”.

La Asamblea Legislativa del DF (ALDF) y el Gobierno de la Ciudad  (GDF) hacen  circo maroma y teatro por conseguir una extraordinaria y jugosa partida presupuestal.

Y es que el lunes pasado, los legisladores locales celebraron un periodo ordinario de sesiones para aprobar un nuevo Código de Procedimientos Penales para el DF que nunca entrará en vigor.

De acuerdo con el dictamen –de vanguardia, dicen los asambleístas– la investigación de los delitos será más transparente y eficaz. Y pondrá fin a los presuntos culpables.