La Rumba, al igual que Los Rieles Revolución, comenzó operaciones durante el sexenio de Natividad sin contar con permiso municipal
Lo peor de La Rumba sucedió el 6 de septiembre de 2009, cuando fue levantado de ese antro Jorge Hobbs Flores, fiscal federal antidrogas
Los Rieles no es el único bar polémico ligado con el hermano del exgobernador de Nuevo León, Natividad González Parás.
La Rumba, una controvertida discoteca que operó de manera ilegal hasta hace dos años, también estuvo ligada con Gustavo González Parás, hermano del exmandatario estatal que hoy pretende ser embajador de México en Argentina.
La revelación de este nexo entre el mayor de los hermanos González Parás y la operación de este bar es revelada gracias a un pleito legal.
El antro estaba ubicado en el centro de Monterrey y es el mismo donde en el 2009 se registró el secuestro de un fiscal federal antidrogas.
La conexión con Los Rieles y ahora con la Rumba pone sobre la mesa los negocios oscuros que tenía la familia de Natividad, quien terminó su periodo en el año 2009.
El día de ayer Reporte Indigo publicó una relación de los señalamientos de tráfico de influencias y conflictos de intereses que persiguen a Gustavos, Luis Francisco y Javier, hermanos del exmandatario estatal priista.
Hoy con la Rumba, suman ya dos firmas de antros donde se presentaron hechos delictivos asociados con el crimen organizado y el narcotráfico, ambas relacionadas con Gustavo González Parás.
El juicio mercantil 1042/2011, que involucra a Gustavo González Parás con La Rumba, se desahoga en el Juzgado Tercero de Jurisdicción Concurrente del Poder Judicial del Estado.
La demanda mercantil fue presentada por Marco Antonio Moreno Padilla, apoderado legal para pleitos y cobranzas de la empresa Cervezas Cuauhtémoc Moctezuma.
Esta empresa es una filial del Grupo Femsa que encabeza el empresario José Antonio Fernández.
Es la misma empresa cervecera que demandó a Operadora de Servicios FGG, S.A. de C.V., la firma que administra el polémico bar Los Rieles de la avenida Revolución, antro con un historial negro en la ciudad.
Pero en el caso de La Rumba, la empresa denunciada es Grupo Premier Universal, S.A. de C.V., que según registros y directorios se localiza en la dirección Escobedo 574, en el centro de Monterrey, justo el domicilio donde se encontraba el antro.
Entre los demandados, además de Gustavo González Parás, está Vicente Flores Flores, Gerardo Flores Flores y Vicente Flores Rodríguez, quienes son también accionistas de Los Rieles, según el acta constitutiva en poder de Reporte Indigo.
El martes Reporte Indigo publicó que tres demandas civiles confirmaban los nexos entre el hermano del exgobernador Natividad González Parás y el polémico antro Los Rieles, que se había manejado como un secreto a voces en los círculos políticos.
La Rumba, al igual que Los Rieles Revolución, comenzó operaciones durante el sexenio de Natividad sin contar con permiso municipal para la venta de alcohol.
El establecimiento cerró en el 2010, cuando ya no era gobernador Natividad, luego del secuestro que sufrió un agente de la PGR dentro de este lugar.
En el padrón de Alcoholes regio disponible en internet no aparece ninguna licencia ligada al domicilio donde operaba La Rumba.
Al igual que en Los Rieles, en la Rumba se registraron hechos criminales.
El peor de La Rumba sucedió el 6 de septiembre de 2009, cuando fue levantado de ese antro Jorge Hobbs Flores, fiscal federal antidrogas asignado a la Procuraduría General de la República.
La privación ilegal del agente del Ministerio Público provocó el inicio de una averiguación por parte de la PGR, pero nunca se informó sobre el avance de la investigación.
Jorge Hobbs Flores fue secuestrado por los integrantes del grupo armado, quienes hicieron detonaciones dentro del establecimiento para intimidar a los clientes que se divertían en la discoteca. Nunca se supo nada él.
La Rumba funcionaba como una discoteca con ambiente de salsa, donde se presentaron diversos cantantes de este género como Oscar D’León y la Sonora Matancera.
A raíz de esto, La Rumba cerró sus puertas sin que se mencionara en las investigaciones sobre la desaparición del fiscal.
Pero apenas hace dos meses inició operaciones en el mismo lugar un antro llamado Fut Rock Concert Club.
Este nuevo negocio funciona como sala de conciertos, pero se desconoce si Gustavo González Parás está involucrado y si éste cuenta con la autorización municipal para vender bebidas alcohólicas.