Contaminar cuerpos de agua en Jalisco ameritará multas de hasta 4.2 mdp

Se busca combatir la contaminación de cuerpos de agua como el Río Santiago, donde se han detectado más de mil sustancias tóxicas

El Congreso de Jalisco aprobó una reforma legal para aumentar las multas económicas por contaminar cuerpos de agua en el estado que las hará alcanzar un tope máximo de 4.2 millones de pesos, complementadas con nueve años de prisión para los que cometan esta práctica ilícita.

La reforma autorizada por los legisladores requirió de modificaciones a distintos ordenamientos legales incluyendo el Código Penal del Estado así como las leyes de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente; de Gestión Integral de los Residuos y, finalmente, la del Agua del Estado de Jalisco.

Una de las legisladores autora de la iniciativa, Priscilla Franco Barba, del partido MC, refirió que este aumento de las multas que ameritarán los particulares y empresas que contaminen los cuerpos de agua del estado, forma parte de un conjunto más amplio de acciones implementadas en el ámbito medioambiental, incluyendo “el fortalecimiento de la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente al triplicar su presupuesto en relación con el ejercido el año anterior”.

Y agregó la diputada: “Un segundo gran paso que hemos logrado  en esta materia lo dimos en días pasados al haber aprobado que el Ejecutivo del Estado pueda invertir hasta 800 millones de pesos en la construcción de plantas de tratamiento de aguas residuales, 13 de ellas para el rescate del Río Santiago, y con la reforma que acabamos de aprobar estamos eliminando la simulación del cumplimiento de la legislación ambiental”.

Precisamente el Río Santiago del estado de Jalisco, mismo que fue inspeccionado el 7 de septiembre de 2016 por el  Grupo de Trabajo de Naciones Unidas sobre Empresas y Derechos Humanos, fue considerado por esta instancia internacional como el afluente más afectado del país por el grado de contaminación que presenta. Así lo expresó ese ente aquel día:

“En Jalisco, el Grupo de Trabajo conoció el caso del Río Santiago, considerado el río más contaminado en México. El río recibe descargas de más de 300 industrias en el corredor industrial Ocotlán-El Salto, uno de los corredores industriales más importantes del país. Una de las zonas más contaminadas del río fluye a través de los municipios de Juanacatlán y El Salto, con un total de 300 mil habitantes”.

Para luego señalar que “fue un fuerte impacto ver el río cubierto de espuma y el olor de fuertes gases que se desprende del agua que cae en la cascada, El Salto”.

El Grupo de Trabajo de Naciones Unidas consignó en aquella inspección que en el Río Santiago “los efluentes principales se derivan de las industrias metalmecánica y metalúrgica, químico-farmacéutica, electrónica, automotriz, y de alimentos y bebidas. Un estudio realizado por el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua encontró un total de 1090 sustancias tóxicas, productos químicos y metales en el río, principalmente de fuentes industriales”.

De acuerdo con la legisladora, con la reforma aprobada este 26 de marzo para castigar con mayor fuerza a los contaminadores de los ríos y en general de los cuerpos de agua en el estado con más de 4 mdp se han subsanando las “discrepancias sancionatorias” que existían en las distintas legislaciones que fueron intervenidas para ello, pues:

“Cada uno de estos instrumentos jurídicos presentaba multas similares, con ello estamos dando mayor claridad a los particulares y combatiendo la discrecionalidad con la que pudieran actuar las autoridades ambientales estatales y municipales, y estamos fortaleciendo la normatividad para que la autoridad ambiental cuente con la certeza jurídica para garantizar los requisitos dentro del debido proceso sin violentar ninguno de los principios que rigen el procedimiento administrativo en la materia”, aseguró.

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