Salva Congreso a las más cuestionadas
Diputados del Congreso local prefirieron velar por los intereses políticos-partidistas que atender los reclamos de la ciudadanía por las cuentas públicas cuestionadas en las administraciones de Rodrigo Medina y Natividad González Parás.
Jesús Padilla
El ejercicio fiscal aprobado por los legisladores que más llama la atención es la cuenta del Isssteleón, donde se generó un déficit porque el fondo de pensiones se utilizó en la adquisición de bonos bursátiles de vivienda
Al cierre del ejercicio 2013 como consecuencia de las situaciones actuales del mercado dichas inversiones tienen una minusvalía de $342,037,141”
Diputados del Congreso local prefirieron velar por los intereses políticos-partidistas que atender los reclamos de la ciudadanía por las cuentas públicas cuestionadas en las administraciones de Rodrigo Medina y Natividad González Parás.
Los legisladores del PRI y PAN aprobaron en un solo paquete 137 cuentas públicas, entre ellas están por lo menos cinco señaladas por la Auditoría Superior del Estado.
Se trata de Isssteleón, Parque Fundidora, Poder Judicial del Estado, Fondo de Desastres Naturales y el Instituto de Evaluación Educativa de Nuevo León (Ideeleon).
Pero el ejercicio fiscal aprobado por los legisladores que más asombra es la cuenta del Isssteleón.
El ejercicio fiscal de este instituto estatal presenta un quebranto de 342 millones de pesos del fondo de pensiones, dinero que se utilizó en la adquisición de bonos bursátiles de vivienda en emisiones de Crédito y Casa, Hipotecaria Su Casita y Metrofinanciera.
Estas últimas compañías financieras, junto con TV Azteca Noreste, forman parte de Grupo Avalanz.
La historia del quebranto comenzó a través de Grupo Financiero Value como empresa intermediaria, quien compró a Isssteleón un millón de certificados bursátiles (CB’s ) con clave HSCCB 07 03, pero fueron emitidos por Hipotecaria Su Casita, una empresa que terminó en quiebra en el 2008.
Aunque el Congreso rechazó la cuenta pública de 2008 del Isssteleón, de la gestión del priista Eduardo Bailey, avaló las cuentas de sus sucesores, Pedro Morales Somohano y Luis Gerardo Treviño de 2009, 2010, 2011 y 2012.
Este último exfuncionario es señalado por el quebranto del Instituto de Seguridad y de Servicios
Sociales del Estado de Nuevo León.
El informe del 2013 de la Auditoría Superior del Estado advirtió del quebranto por 342 millones de pesos en el portafolio de inversiones de Isssteleón en la compra de estos CB’s.
Pero este señalamiento poco le importó a los legisladores.
“Al cierre del ejercicio 2013 como consecuencia de las situaciones actuales del mercado dichas inversiones tienen una minusvalía de $342,037,141”, señala el dictamen de la revisión de la cuenta pública 2013, que realizó Gilberto Mireles Rivera, auditor especial de Municipios.
La revisión de la Auditoría Superior del Estado se concreta con dos años de desfase, es decir, las cuentas del 2011 terminan por revisarse hasta el 2013, es por eso que el quebranto del Isssteleón se dio a conocer en este año.
Otra cuenta pública del Isssteleón aprobada fue con el número de expediente 7111 correspondiente al ejercicio fiscal de 2010, y presenta recursos no solventados por 23 millones de pesos.
Los diputados panistas y priistas aprobaron este dictamen por mayoría, sólo la bancada independiente y Movimiento Ciudadano votaron en contra.
Avalan derroche del Poder Judicial
Diputados del Congreso local aprobaron el derroche de recursos sin justificar del Poder Judicial de Nuevo León de la gestión del magistrado Gustavo Guerrero, que presidió durante la administración de Rodrigo Medina.
La Auditoría Superior del Estado detectó presuntas irregularidades por 243 millones de pesos, en obras públicas y colecciones de arte no justificadas en 2014.
El órgano fiscalizador emitió observaciones no justificadas en 10 licitaciones para obra por un monto de 200 millones de pesos, mientras en esculturas y pintura se gastó 43 millones 921 mil 864 pesos, por ejemplo, compraron cinco esculturas de mármol y alabastro de la artista Natalia Martínez por un monto de 98 mil 600 pesos.
A pesar de estos señalamientos, el Congreso local aprobó las cuentas públicas 2013 y 2014 en un bloque dictaminado el pasado miércoles en una maratónica sesión extraordinaria.
Por mayoría, los diputados avalaron estos ejercicios fiscales. Todo apunta que el Tribunal de Justicia de Nuevo León salió bien librado de los señalamientos de la Auditoría.
Y protegen ‘el desastre’
La cuenta pública de 2013 del Fondo de Desastres Naturales Nuevo León y el ejercicio fiscal del Instituto de Evaluación Educativa de Nuevo León de 2014, recibieron la protección del Congreso local.
El instituto educativo presentó montos no solventados por mil millones 275 mil 805 pesos, como consta en el dictamen de la cuenta pública de la Auditoría Superior del Estado.
“Los actos u omisiones observados constituyen incumplimientos a las disposiciones legales o reglamentarias”, cita el documento.
En cuanto al Fondo de Desastres Naturales, la Auditoría Superior de la Federación evidenció que el gobierno de Rodrigo Medina quedó debiendo recursos por los fondos que recibió por los daños del huracán Alex.
El dinero no se utilizó en las obras previstas estimado en 600 millones de pesos, por lo que las autoridades estatales debieron devolverlo ese mismo año.
Por esa razón, Nuevo León no tendría acceso a apoyos federales en caso de sufrir un desastre natural.
