Redes de poder MTY: Evitar el autogobierno y distintos panoramas en seguridad

Las autoridades del Penal de Apodaca tendrán un nuevo reto ahora que han recibido internos del Penal del Topo Chico, pues su primer objetivo debería ser evitar que se convierta en una prisión con autogobierno. El Gobierno está festejando el cierre del Topo Chico, pero no ha informado sobre la situación de los custodios que […]

Las autoridades del Penal de Apodaca tendrán un nuevo reto ahora que han recibido internos del Penal del Topo Chico, pues su primer objetivo debería ser evitar que se convierta en una prisión con autogobierno.

El Gobierno está festejando el cierre del Topo Chico, pero no ha informado sobre la situación de los custodios que tendrá el Penal de Apodaca, que también ha tenido episodios de violencia. Basta con recordar la matanza de 44 internos y la fuga masiva de reos en febrero de 2012.

El alcalde de Apodaca, César Garza, dejó entrever que tiene dudas, sobre todo respecto a la cantidad de custodios con los que cuenta el gobierno para garantizar que el Centro Penitenciario sea plenamente controlado por las autoridades penitenciarias, pues dijo que en Nuevo León solo cubre con el 30 por ciento de la cantidad de celadores.

Unos 2 mil 400 reos han sido trasladados al Penal de Apodaca, muchos de ellos han participado en riñas, motines y habrían sido parte del autogobierno que tenía el Penal de Topo Chico.

Habrá que estar muy atentos en los próximos días sí se acoplan estos nuevos inquilinos con los internos que están en Apodaca, ya que no se puede destacar que pueda haber algunas semanas ríspidas y un reacomodo en la vida interna del centro. La administración de Jaime Rodríguez deberá de estar atenta para evitar conflictos mayores.

Distintos panoramas en seguridad

El diputado local priista Álvaro Ibarra ha sido cuestionado ahora que es uno de los principales impulsores de la cesión del mando de seguridad en Monterrey al municipio, ya que durante su etapa como secretario de Gobierno estatal se opuso a dicho traspaso.

El legislador defiende, sin embargo, que el contexto político y de seguridad es muy distinto, y que en las condiciones en las que el actual alcalde Adrián de la Garza pretende asumir el mando en seguridad sí es posible comenzar la transición; y considera que durante el mandato de Margarita Arellanes las circunstancias no eran propicias.

Es cierto, la policía regia no solo ha aumentado su número de efectivos y de patrullas, sino que ha puesto énfasis en capacitación, equipamiento y en uso de inteligencia; en comparación hace 5 años la policía de la capital de Nuevo León sufría en el abandono.

Otro punto clave es que cuando Margarita Arellanes quiso asumir el control total en seguridad, la corporación Fuerza Civil tenía prestigio, organización y confianza ciudadana, mientras que hoy está en entredicho y el gobierno estatal ha dejado de invertir en ella.

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