La “advertencia” del senador panista con licencia, Victor Fuentes Solís, de no apoyar al PAN en las próximas elecciones

Redes de poder MTY: El capital de los aspirantes del PAN y simulación política

La “advertencia” del senador panista con licencia, Victor Fuentes Solís, de no apoyar al PAN en las próximas elecciones en caso de que se confirme la candidatura de Manuel González por una diputación con el blanquiazul, abre nuevamente el debate sobre el papel que podrían tomar algunos de los aspirantes a la candidatura a la […]

La “advertencia” del senador panista con licencia, Victor Fuentes Solís, de no apoyar al PAN en las próximas elecciones en caso de que se confirme la candidatura de Manuel González por una diputación con el blanquiazul, abre nuevamente el debate sobre el papel que podrían tomar algunos de los aspirantes a la candidatura a la gubernatura en sus partidos, en los próximos comicios.

Fuentes ya tuvo una invitación por parte de la candidata de Morena, Clara Luz Flores, para integrarse a su equipo; además, el partido guinda ha tenido acercamientos con Felipe de Jesús Cantú para que sea candidato a una diputación federal.

Ambos panistas fueron aspirantes a la candidatura a la gubernatura de su partido (Felipe finalmente no se registró) y también terminaron decepcionados ante lo que consideraron una imposición en favor de Fernando Larrazábal.

Más allá de las posibles candidaturas que pudieran negociar, el verdadero daño para el PAN es que terminen operando en su contra durante la elección.

Simulación política

La competencia electoral del próximo 6 de junio será recordada por una desmedida obsesión de la clase política en Nuevo León para mantenerse vigente a cualquier costo. Los ciudadanos experimentarán una mezcla de candidatos que salieron de un partido para enrolarse a otro, que comenzaron el proceso electoral con una camiseta y terminaron con otra, y aún así, estarán en la boleta, o bien, como parte importante de los proyectos políticos en la entidad.

Esto habla de una simulación de los políticos que, sin importar que sus principios no comulguen con la ideología de un partido, cambian su bandera con tal de llegar al cargo público.

Sin duda, estas acciones son materia de análisis de los votantes, y como nunca va a ser necesario un verdadero ejercicio de conciencia antes de decantarse por alguna opción. Esta mezcolanza electoral coloca a Nuevo León como un mal ejemplo a nivel nacional.

Pero son los partidos políticos, sobre todo el PAN y PRI, los que cargan con la mayor responsabilidad, ya que con sus imposiciones en las candidaturas han provocado que muchos busquen otro partido u otra opción política.

También la reelección de diputados locales y alcaldes ha provocado una desbandada de militantes.

Hoy Morena, es una opción viable para muchos eternos aspirantes que han sido despreciados por otros institutos políticos, pero hasta en este partido de más reciente creación y que apenas se está asentando en Nuevo León los espacios ya no están alcanzando.

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