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Efecto rebote por ‘El Toro’ y los asesores de ‘El Bronco’

Nuevo León no se librará de las repercusiones y reacomodos que traerá la muerte del “Comandante Toro”, ocurrida el fin de semana en la ciudad de Reynosa.

Juan Manuel Loisa Salinas, líder del Cártel del Golfo, fue abatido por elementos de la Marina en un enfrentamiento que habría provocado bajas tanto de la Marina como del grupo de escoltas que protegían al capo.

Con la muerte de este capo, el Cártel de los Zetas se afianzará en la zona fronteriza de Tamaulipas y en el municipio de Colombia, Nuevo León.

Nuevo León no se librará de las repercusiones y reacomodos que traerá la muerte del “Comandante Toro”, ocurrida el fin de semana en la ciudad de Reynosa.

Juan Manuel Loisa Salinas, líder del Cártel del Golfo, fue abatido por elementos de la Marina en un enfrentamiento que habría provocado bajas tanto de la Marina como del grupo de escoltas que protegían al capo.

Con la muerte de este capo, el Cártel de los Zetas se afianzará en la zona fronteriza de Tamaulipas y en el municipio de Colombia, Nuevo León.

Las autoridades esperan que el primer coletazo violento, a raíz de la muerte del líder del CDG, se presente en la zona de los municipios de Juárez, Cadereyta y Pesquería, donde por cierto la noche del martes ejecutaron a dos personas.

Los asesores de ‘El Bronco’

Como estará de desesperado el gobernador Jaime Rodríguez, que ha tenido que dejar su orgullo “independiente” y ha tenido que recurrir a expertos en el tema de seguridad ligados con el PRI y el PAN.

El panista José Martín Doria Mata y el priista Gerardo Saúl Palacios Pámanes se han convertido en los consejeros de cabecera en materia de seguridad del gobierno independiente.

Doria Mata lo hace en la Agencia Estatal de Investigaciones, que encabeza el contralmirante Augusto Cruz Morales mientras que Palacios Pámanes lo hace en la Secretaría General de Gobierno, que preside Manuel González.

Un panista y un priista son los gurús en el área de seguridad tras bambalinas, sin olvidar que el corazón tricolor del procurador del Estado, Bernardo González.

Samuel, el dirigente usurpador

Exhibido y con un serio problema legal, terminó ayer el diputado de Movimiento Ciudadano, Samuel García, en la sesión del consejo general de la Comisión Estatal Electoral.

La petición para realizar un plebiscito sobre el uso que hay que darle al cauce del Río Santa Catarina puso en evidencia que Samuel no ha hecho la tarea de acreditarse en la CEE como nuevo dirigente estatal de MC.

Fue el consejero Javier Garza, quien más se regodeó de la situación y se encargó de hacer pedazos la petición.

El descuido sería un asunto de poca importancia si no fuera porque Samuel se la ha estado pasando -desde que tomó protesta hace un mes y medio- firmando cheques de gastos del partido político.

Samuel estaría cometiendo un delito federal al hacer uso de los 2 millones mensuales que recibe de financiamiento público MC en Nuevo León sin contar con una acreditación legal reconocida por las autoridades electorales de Nuevo León.

Marco consigue uno para el PRI

El retorno al PRI del alcalde de Zaragoza, Jaime Gallegos Escobedo, fue una operación política del coordinador de los diputados tricolores en el Congreso, Marco González.

González, junto con el legislador Juan Espinoza Eguía, convencieron a Gallegos de renunciar al Partido del Trabajo y retornar al Revolucionario Institucional y a la Confederación Nacional Campesina (CNC).

Con la reincorporación de Gallegos, Marco consolidó la presencia de la CNC y del PRI en todo el sur de Nuevo León.

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