Hernán Villarreal, secretario de Movilidad, deberá aprender de la lección que le dio la naturaleza tras la tormenta Alberto, que llenó al río Santa Catarina. Foto: Especial

Redes de Poder MTY: Lo que sigue es administrar el agua y la lección para Hernán

La hipótesis mencionaba que por la llegada de fuertes lluvias se iba a inundar el primer cuadro de Monterrey, lo cierto que no sucedió

La naturaleza hizo su trabajo para mitigar la grave sequía que padecía Nuevo León, pues las lluvias que trajo consigo la tormenta Alberto subirán los niveles de las tres presas.

Lo interesante será saber si hay algún proyecto para realizar una mejor administración del líquido por parte de Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey, a cargo de Juan Ignacio Barragán.

El reporte es que hubo precipitaciones pluviales por 372 milímetros, un poco más de lo que cayó con la tormenta tropical Alex en 2010, aunque la realidad es que las condiciones son muy distintas hoy que hace 14 años que llegó este meteoro.

Resulta que actualmente hay más población y, por consecuencia, se tiene mayor demanda de agua que hace 14 años, por eso resulta importante tener una mejor administración del líquido.

Habrá que ver cuánta agua captarán las presas, por lo pronto La Boca se llenó y tuvo que desfogar líquido, la de Cerro Prieto subió un 4 por ciento de lo que tenía y El Cuchillo también presenta un aumento.

La lección para Hernán

El llenado del Río Santa Catarina por las lluvias de la tormenta Alberto, tendría que ser una lección para el secretario de Movilidad y Planeación Urbana del Gobierno estatal, Hernán Villarreal.

Este lecho resistió los embates de esta tormenta a pesar de que se ha construido en el caudal, algo que el funcionario planeaba seguir haciendo con la edificación de una vía de cuota.

No cabe duda de que la naturaleza es sabia y puso en su lugar a Hernán, sobre todo para que no vuelva a intentar buscar la forma de privatizar el Río Santa Catarina.

Por lo pronto la hipótesis que mencionaba que por la llegada de fuertes lluvias se iba a inundar el primer cuadro de Monterrey, lo cierto que no sucedió.

Habrá que ver si el funcionario entiende que es una válvula de escape de agua para la ZMM, porque la vegetación ayudó a que no se desbordara.

Por cierto, varias de las columnas del Metro están sobre el río, lo que, sin duda, representaría un riesgo de colapso.

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