Irán negó que busque extender el conflicto en la región y reiteró su compromiso con la defensa de su soberanía. Foto: Especial

La posición de Irán ante el mundo

Los eventos del fin de semana marcan la primera vez que el régimen de los ayatolá atacan directamente a Israel; sin embargo, el país persa justifica sus acciones como un acto de legítima defensa

Durante las décadas que siguieron a la revolución iraní el régimen islámico ha utilizado a terceros para realizar sus ataques; sin embargo, este fin de semana la Guardía Revolucionaria Islámica lanzó más de 300 drones y proyectiles en contra de Israel, lo que constituye un cambio en el statu quo de la región.

La República Islámica de Irán justificó sus acciones del pasado 13 de abril como un ejercicio de legítima defensa, fundamentado en el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas, ante las agresiones militares israelíes que resultaron en la muerte de dos generales que se encontraban en la embajada iraní en Siria. De acuerdo con el Ministerio de Relaciones Exteriores del país persa, las medidas tomadas en aras de su defensa nacional son una muestra de su compromiso con la paz regional e internacional.

Mientras el régimen iraní busca enmarcar sus acciones como legítima defensa ante la destrucción de su sede diplomática en Siria, Israel apela al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) para que se condenen los actos del pasado sábado y se imponga un castigo a Irán.

Los eventos del fin de semana obligaron a una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad, en donde los representantes de Irán e Israel intercambiaron insultos y acusaciones mientras el secretario general de la ONU, António Guterres, hacía un llamado a moderación.

Irán se justifica ante el Consejo de Seguridad

Durante la reunión extraordinaria el embajador iraní ante las Naciones Unidas, Amir Saeid Iravani, negó que su país busque extender el conflicto en la región y reiteró su compromiso con la defensa de su soberanía. Iravani responsabilizó al Consejo de Seguridad de no poder mantener la paz en la región al no condenar las acciones israelíes en contra de su representación en Damasco.

“Estas acciones fueron necesarias y proporcionadas, fueron precisas, sólo estaban dirigidas a objetivos militares y fueron llevadas a cabo para minimizar la posibilidad de escalamiento y evitar daños civiles (…) Estos países, en especial Estados Unidos, han blindado a Israel de cualquier responsabilidad por la masacre en Gaza mientras han negado el derecho iraní a la defensa contra el ataque israelí en nuestras sede diplomática al tiempo que justifican el genocidio israelí en contra del pueblo palestino bajo el pretexto de la legítima defensa”, declaró Iravani.

Por su parte, la intervención del embajador israelí en las Naciones Unidas, Gilad Erdan, enfatizó que el ataque a su país demuestra el peligro que el régimen iraní representa no sólo para Israel o la región, sino para todo el mundo. Durante su discurso, Erdan, resaltó que las ofensivas iraníes no se reservan para Israel sino que también han atacado a países árabes a través de terceros.

“El régimen del Ayatolá, en su afán de imponer una hegemonía Chiíta, ha atacado a Arabia Saudita, a los Emiratos Árabes Unidos y a cualquiera que vean como un obstáculo. La estrategia iraní es bastante clara: armar, patrocinar y entrenar a terroristas alrededor del mundo para llevar a cabo su sanguinario plan de dominación. Pero hoy se ha caído la máscara de Irán, no más esconderse, no más aparentar, no más eludir su responsabilidad”, expresó el representante israelí.

En la reunión del Consejo de Seguridad el embajador israelí también acusó a Irán de ser el mayor patrocinador del terrorismo a nivel mundial. Esta narrativa se sustenta en años de inteligencia que apuntan que organizaciones denominadas terroristas, como Hezbollah, Hamás o los Hutìes, han recibido apoyo logístico, financiero y militar por parte del régimen en Teherán.

Continúa la política de desestabilización

En opinión de Genaro Beristain, maestro en Relaciones Internacionales y especialista en Seguridad Internacional del Centro de Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional Autónoma de México, a pesar de que en los eventos del pasado sábado Irán tomó responsabilidad por su respuesta, esto no implica un cambio en su política de utilizar terceros para desestabilizar a sus rivales regionales.

“Irán tenía que responder de esta manera porque ante la comunidad internacional ellos habían recibido un ataque a su consulado, no se podían quedar con los brazos cruzados a esperar que el derecho internacional o el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas exigiera respuestas e impusiera sanciones a Israel, eso no iba a pasar. Tenían que dar una respuesta directa para hacer notar su contestación ante la agresión israelí, pero seguirán financiando a los grupos opositores alrededor de Israel”, apunta Beristain.

Después de la revolución islámica la posición de Irán en la palestra internacional ha sido controversial y durante las acciones de este fin de semana actores internacionales manifestaron su preocupación por la escalada de violencia. Si bien muchos países llamaron a la calma y el diálogo, Rusia, durante la reunión del Consejo de Seguridad, también reconoció el derecho de Irán de defender su soberanía.

“Es importante recalcar que muchos países, de la misma manera en la que toman distancia con respecto a Israel, en el sentido en que no hay una condena pero se están alejando de sus actitudes, habrá Estados que no dejen solo a Irán pero no lo van a manifestar. Aunque sólo Rusia utilice la voz para hablar, en cierta forma, a favor de Irán, habrá otros países que piensen que Irán tiene derecho a una retaliación por el ataque que recibió  y que no lo van a manifestar”, señaló el académico.

Mientras en el plano internacional Irán se encuentra en una posición precaria después de su respuesta al ataque Israelí, en el frente doméstico el régimen no enfrenta una oposición lo suficientemente notable como para convertirse en un problema.

“Hay que recordar que no todos los iraníes pueden ser cortados con la misma tijera, por supuesto que el régimen tiene opositores pero también cuenta con ciudadanos que lo apoyan y podemos encontrar extremistas en ambos lados (…) si bien la respuesta iraní fue un tanto mesurada y podemos encontrar gente muy radicalizada que consideren que no es suficiente como gente que esté en contra, lo importante es señalar que ni un grupo ni otro encontrará eco en el gobierno”, finaliza el especialista.

Te puede interesar