La tarjeta de crédito permite financiar el consumo personal, generar una identidad dentro de las instituciones bancarias  y hasta controlar los gastos que suelen realizarse. Foto: Especial

Un tarjetazo inteligente

La tarjeta de crédito puede ser la mejor aliada para el consumo diario si se aprende a usar de manera adecuada, por encima del impulso y las trampas publicitarias

El uso correcto de la tarjeta de crédito permite acceder a diversas ventajas en materia financiera y de consumo, sin embargo, esa oportunidad se desaprovecha cuando no se comprende su funcionamiento ni se elige la mejor opción.

Pagos a meses sin intereses, ventas exclusivas y mejores condiciones crediticias son algunos de los beneficios que se obtienen al realizar compras con tarjetas bancarias, no obstante, el endeudamiento, las penalizaciones y comisiones también forman parte de esa realidad.

Al intentar entender si una tarjeta de crédito es buena o mala, Juan Ordaz, director de educación financiera de Citibanamex explica a Reporte Índigo que en realidad se trata de una herramienta fundamental para el manejo de las finanzas personales que refleja la capacidad de control y administración de las personas.

“Los expertos consideran que es el mejor invento en materia de administración personal porque nos permite financiar nuestro consumo, generar un historial crediticio y hasta nos ayuda a monitorear nuestro gasto; sin duda es un instrumento útil y necesario para facilitar la vida siempre y cuando lo utilicemos de forma adecuada“, señala Ordaz.

Más allá del juicio de valor que se pueda generar sobre el instrumento crediticio, la realidad es que ha tomado una importancia cada vez mayor dentro de la serie de mecanismos de pago disponibles dentro de nuestra economía, por ejemplo, durante el primer trimestre del año, de cada 10 compras hechas en portales de comercio electrónico del país, tres fueron realizadas con tarjetas de crédito, sumando un total de 92 mil millones de pesos, según estima la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).

Por ello, la comprensión y manejo de la tarjeta de crédito resultan aspectos fundamentales para obtener el mayor beneficio a la hora de usar el producto bancario que cuenta con más de 34 millones de usuarios dentro del país, de acuerdo con los datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).

Revisa tu situación financiera para decidir

El primer paso para poder aprovechar al máximo una tarjeta de crédito es saber si se cuenta con las condiciones económicas necesarias para poder respaldar el compromiso que implica, porque no es dinero extra, es una promesa de pago, señala el director de educación financiera de Citibanamex.

Para ello es necesario elaborar un presupuesto que permita establecer el estado de las finanzas personales de cada persona, y partir de su resultado, tomar la decisión de  solicitar o no un producto financiero; dicha decisión se puede acompañar de la revisión del historial crediticio que empresas como Buró de Crédito y Círculo de Crédito proporcionan, de manera gratuita, una vez al año.

Elige la tarjeta, que ella no te elija

Si se tienen las condiciones adecuadas para adquirir una tarjeta bancaria,  lo más apropiado es revisar las opciones que existen en el mercado y que mejor se adapten a las necesidades y alcance requeridos; Condusef cuenta con información referente a los cobros, comisiones y características de cada producto bancario, lo que puede ayudar a tomar la decisión correcta.

Es esencial considerar aspectos como la anualidad, la tasa de interés, el Costo Anual Total (CAT) y el límite de crédito a la hora de elegir y no caer en la trampa de una campaña de  publicidad bancaria bien elaborada o la rutina de un vendedor experimentado. 

Los montos y las fechas son lo más importante

Ya con la tarjeta es necesario monitorear que el consumo no rebase el 30 por ciento del ingreso mensual para que mes con se cuente con el recurso económico suficiente para saldar la cuenta, además, comprar una vez que ha transcurrido la fecha de corte puede otorgar un plazo hasta de 50 días para pagar, ya que el crédito brinda 30 días para consumir y 20 para realizar el pago.

“Por ejemplo, si tu fecha de corte es el día 14, empieza a contar desde el 15, estas marcas representan el inicio y el fin del periodo de crédito: los primeros 30 días corresponden al tiempo de uso del crédito y los 20 restantes al periodo en el que debes pagar todo lo que hayas comprado dentro de los primeros 30 días”, ejemplifica la Asociación de Bancos de México (ABM).

Tu objetivo, liquidar siempre la tarjeta

“Si tienes tarjeta de crédito y cada mes depositas solo el mínimo ¡cuidado!, terminarás pagando más de intereses y alargarás tu deuda por mucho tiempo. Lo mejor para tu bolsillo es realizar el pago para no generar intereses o, en su caso, depositar más del monto solicitado”, advierte la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).

Aunque puede implicar un mayor esfuerzo económico, lo  recomendable es que siempre se pague la cantidad marcada como la indicada para no generar intereses, ya que esa mantiene al corriente el estado financiero, por el contrario, el pago mínimo solo garantiza mantener vigente la línea de crédito, pero con el pago de los intereses y penalizaciones correspondientes.

Compra inteligente y seguro para optimizar tu consumo

Revisar las motivaciones que impulsan a consumir ayuda a verificar si se está realizando una compra inteligente, o por el contrario, se está adquiriendo algo de manera compulsiva; realizar las compras en establecimientos y plataformas autorizadas ayuda a evitar delitos financieros como el fraude o la clonación de tarjeta.

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