Uno de los grandes JRPGs del primer PlayStation regresa a las consolas actuales en una edición que, la verdad, pudo estar mejor.
Si hay una consola que puede emular la época dorada que tuvieron los JRPGs con el Super Nintendo, esa es la primera PlayStation. Durante el tiempo de vida del sistema creado por Sony, muchas compañías desarrollaron propuestas inolvidables, herederas de las grandes historias y personajes de la era de los 16 bits. SquareSoft (ahora Square Enix) fue una de esas compañías, y dentro de la gran cantidad de títulos que lanzó para el PSX siempre destacó el querido (y a veces incomprendido) Chrono Cross.
UN POCO DE HISTORIA
Presentado en su momento como una pseudo-secuela de Chrono Trigger -considerado por muchos como el mejor JRPG de la historia-, Chrono Cross siguió las fórmulas y formatos de la época para presentarnos una nueva galería de personajes y un viaje interdimensional que giraba alrededor de una flama congelada y un gran villano. Aunque el juego no estuvo a la altura de su predecesor, se sostuvo como uno de los mejores títulos de su tipo para la consola de Sony, e hizo su historia dentro de la (ahora) olvidada franquicia.
Cuando Square Enix anunció el regreso de este juego para las consolas actuales, a pocos les extrañó la grata emoción con la que fue recibida la noticia. Uno de los títulos más importantes del género por fin estaría disponible en las consolas actuales y, lo mejor de todo, es que vendría acompañado de su “pseudo-precuela”, Radical Dreamers, una novela interactiva se lanzó exclusivamente en Japón hace más de 30 años.
MÚSICA PARA VOLAR
Dentro de los elementos que desde siempre han caracterizado los juegos de Square Enix está la banda sonora, y Chrono Cross: The Radical Dreamers Edition no es la excepción. Además de la remasterización del soundtrack y una nueva versión de ‘Scars of Time’ (tema original de Chrono Cross), el compositor Yasunori Mitsuda preparó una nueva canción para Radical Dreamers.
Por otro lado, a nivel gráfico el juego presenta nuevos modelos de personajes, así como escenarios más detallados y la opción de poder jugarlo así, o con las versiones originales. Sobre la resolución, como no se cambió el formato original de 4:3, las tres terribles opciones desperdician espacio de la pantalla o de plano, deforman los gráficos para llenarla; un detalle que para los juegos de esta época (sean remakes o no), ya se ve bastante mal.
Dentro de los detalles que se modificaron al gameplay está la capacidad de hacer que el juego se “mueva” más rápido o más lento, la opción de cancelar encuentros aleatorios con los enemigos y… nada más. Fuera de lo anterior, el título no nos ofrece nada más.
BONITO RECUERDO
Sin dudarlo, podemos asegurarles que Chrono Cross: The Radical Dreamers Edition es su mejor definición un remaster básico, casi un mero port, en donde lo que más destaca es la aventura adicional y el trabajo gráfico para llevar el título adicional a las pantallas de alta definición sin tener que hacer un remake… aunque hubiera estado bien que escalaran también las secuencias animadas.
Chrono Cross es uno de los mejores juegos de su tipo y disfrute mucho volver a jugarlo pero, la verdad, después de todos los grandes remakes y remaster que ha hecho en su historia Square Enix, realmente esperaba que esta edición fuera a estar mejor.
Calificación: 7.0
Para ser la primera reedición de Chrono Cross en los últimos 20 años, esta versión deja mucho que desear. Un remaster básico en todos los sentidos, los fans valorarán más este título por la aventura gráfica que lo acompaña y el simple hecho de que se puede jugar en las consolas actuales. Fuera de ello, el formato, fórmula y desarrollo del juego principal quizá se sienta demasiado viejo para los nuevos jugadores, y los veteranos que acabaron esta joya al 100% hace años no van a encontrar nada nuevo.
Chrono Cross: The Radical Dreamers Edition es un título desarrollado y distribuido por Square Enix para PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox ONE, Xbox Series X/S, Nintendo Switch y PC. Para esta reseña se jugó la versión para Nintendo Switch, la cual fue proporcionada por el distribuidor.
