Diablo IV está cerca. Tras un turbulento desarrollo por fin pudimos probar el primer acto y te damos nuestras impresiones de esta entrega

La cuarta entrega del icónico RPG de Blizzard está cada vez mas cerca. Originalmente planeado para abril de este año, por fin pudimos darle una probadita a la beta de Diablo IV y pasamos el fin de semana matando criaturas del infierno y caminando por mazmorras oscuras ¿Cómo luce hasta ahora el desarrollo de este título? Nosotros te contamos todos los detalles.

ATRAPANTE AL ESTILO DIABLO

El segmento de juego que pudimos probar se trata del primer acto, mismo que antes de darnos gameplay hace gala de una cinemática increíble para ponernos más o menos en contexto. Blizzard tiene una maestría en crear secuencias alucinantes y esta no es la excepción. En esta escena podemos ver a Lilith, la villana del título, que nos dará una imagen muy cruenta y despiadada que nos dejó sorprendidos.

Entrando al gameplay se nota el enfoque narrativo que le están dando los desarrolladores a esta entrega, pues las conversaciones con los distintos personajes a lo largo del mapa serán varias, en las cuales tendremos una amplia variedad de opciones para ir sacando información e ir nutriendo lo que sabemos de su universo.

¿Qué sería de un RPG sin misiones secundarias? En el caso de Diablo IV, podemos decir que son muchas y serán en estas cuando conozcamos más trasfondo sobre los poblados y los personajes que les dan vida, desafortunadamente la variedad no fue mucha, al menos en lo que pudimos jugar. La mayoría se van a reducir en ir de un punto A a un punto B y arrasar con los enemigos que ahí se encuentren.

 Por un lado más positivo, el mapa es amplio y denso. Si, se trata de la misma versión para todos los jugadores y no tendrá ningún factor de generación procedural, pero los escenarios cuentan con varios elementos escondidos que evitan al jugar a explorar hasta el último detalle, regresando ese sentimiento ya conocido en la saga Diablo.

Hablando del ‘sentimiento Diablo’, el diseño de criaturas y locaciones es más oscuro que nunca, recordándonos al estilo de la segunda entrega. La sangre y los monstruos estarán presente en todo momento, haciéndonos caminar por fantásticas pesadillas dignas del nombre que representan.

LA FÓRMULA CLÁSICA

En cuanto a gameplay, el juego no se arriesga y nos entrega un esquema refinado de lo que ya conocemos por entregas pasadas. Los menús tienen un diseño lo suficientemente amigable para que un novato de esta franquicia pueda entrar sin sentirse intimidado.

La versión de prueba sólo nos permitía jugar con tres clases, de las cuales se eligió al hechicero. Personaje que se sintió balanceado en jugabilidad, pero el verdadero problema que encontramos fue con la cuestión de inventario. Nos pareció un poco limitado, en particular el número de pociones que se pueden cargar. Por último, hay un par de opciones de movilidad que se agregan y que traen a esta franquicia a la actualidad. Estoy seguro que los jugadores veteranos del juego van a apreciar.

El primer acto de Diablo IV nos deja con muy buen sabor de boca. Después del tropiezo de cierta conferencia en la Blizzcon, da gusto ver saludable a una franquicia legendaria. Habrá que esperar a la versión completa el próximo 6 de junio para poder dar un veredicto final. Por el momento, tenemos ganas de más.

Te puede interesar