La famosa franquicia de terror está de regreso con un nuevo director y se esfuerza por preservar lo que la hizo memorable. ¿Lo logra?
Evil Dead es una franquicia que a pesar del paso del tiempo ha conservado sus característicos baños de sangre, exceso de violencia y posesiones demoníacas sin mucho sentido o justificación. A partir del reinicio estrenado en 2013, Sam Raimi dejó de dirigir las entregas de esta saga, pero sigue involucrado en la producción y se nota, pues todo el espíritu de las películas clásicas siguen en las nuevas e incluso diría yo que se atreve a empujar un poquito más los límites.
POSESIONES Y BAÑOS DE SANGRE
En Evil Dead: El Despertar seguimos la historia de Beth y Ellie, dos hermanas que se reencuentran para ponerse al día y apoyarse mutuamente durante los tiempos turbulentos que cada una vive en cuánto a familia y decisiones de vida se trata. Beth, una madre de familia con tres hijos y recién divorciada, lucha por buscar un nuevo hogar; mientras que Ellie intenta tomar la difícil decisión de ser o no ser madre. Esta visita se verá interrumpida cuando un hecho (honestamente bastante tonto) permite la llegada de un espiritu demoniaco al departamento de nuestras protagonistas.
Esta trama escrita y dirigida por Lee Cronin, es algo que ya hemos visto una y otra vez en la franquicia. Conocemos a nuestro grupo de personajes, aparece el libro de los muertos, se desata la posesión y comienza una masacre. Uno pensaría que al traer esta historia en un escenario más urbano, aprovecharían para llevar el concepto y escenas a lugares antes no vistos pero no es así… Y eso no es algo precisamente malo. Al final todas las muertes, situaciones y escenas que nos encontramos en esta película son las que ya estamos acostumbrados a ver en una película de Evil Dead y eso incluye la calidad de las mismas. Si antes la producción ponía toda su creatividad para darnos pesadillas a través de escenas en extremo explícitas, ahora que se nota un aumento en el presupuesto la cinta hace gala de escenas horriblemente memorables
UNA VISITA AL PASADO
Durante el desarrollo, pasaremos por una colección de escenas plagadas de referencias a las películas dirigidas por Raimi, que van desde una reimaginación de la icónica escena del árbol en la primer película, hasta la inconfundible motosierra.
Algo digno de reconocer en esta película, es que no se toca el corazón con ninguno de los personajes y eso incluye a los hijos de Beth. Todo para demostrar que nadie está a salvo del demonio convocado por el infame libro de los muertos. La película dura un poco más de hora y media, pero se necesitará de un estómago fuerte y ojos decididos a ver un festival de sangre, entrañas y gritos. Los fans de la serie estarán muy satisfechos por ver y sentir esta atmósfera en la que nadie está a salvo.
En definitiva Evil Dead: El Despertar no es para públicos sensibles o que no esté acostumbrado a ese tipo de terror tan explícito. Por otro lado, aquellos que ya conozcan la franquicia o disfruten del body horror, encontrarán la película ideal. La película logra ser memorable sin su famoso personaje principal ni servilismo fan barato al que han recurrido algunas sagas clásicas famosas que han intentado regresar.
