La controversia entre el Gobierno independiente con la armadora Kia Motors México terminó ayer con un nuevo acuerdo, que mantiene algunos de los incentivos otorgados por la administración del exgobernador Rodrigo Medina.

Entre aplausos y sonrisas, el mandatario Jaime Rodríguez Calderón, junto con los funcionarios de su gabinete y ejecutivos de la armadora coreana, celebraron este nuevo convenio.

Sin informar el monto del ahorro en este nuevo acuerdo, el gobernador se mostró satisfecho por esta negociación.

La polémica en la Secretaría de Educación que encabeza Esthela María Gutiérrez Garza se incrementa.

Ahora por la creación de seis nuevas coordinaciones y tres de jefes de área, desafiando las declaraciones de austeridad del gobernador independiente Jaime Rodríguez Calderón.

“El aparato de gobierno es muy gordo, se dio oportunidad de trabajo a muchos militantes de partidos políticos en puestos que no eran necesarios”, dijo “El Bronco” en enero de este año.

Pero pareciera que la Secretaría de Educación contradice las palabras del mandatario.

Para disminuir el tiempo de traslado en la zona metropolitana, afectado en ocasiones por el paso del tren, el Gobierno del Estado anunció la liberación de 20 vías férreas que podrían ser consideradas para proyectos como ciclovías o la instalación de Autobuses de Tránsito Rápido (BRT’s, por sus siglas en inglés).

Lo anterior fue anunciado por el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, en un evento público en el que se analizó el tema de mejorar la movilidad urbana.

La Auditoría Superior del Estado (ASE) encontró severas irregularidades en la construcción de las plataformas que hizo el Gobierno del Estado para la planta de la armadora KIA Motors México en el municipio de Pesquería.

El gobierno de Rodrigo Medina utilizó el Sistema Estatal de Caminos, y no la Secretaría de Obras Públicas del Estado, para realizar estas obras que en total representaron un costo superior a los mil 500 millones de pesos.

Cansado, cabizbajo y apoyado con un bastón, Jaime Montoro Loyo camina

por los pasillos del Palacio de Cantera a paso lento con la esperanza de encontrarse con el gobernador, Jaime Rodríguez Calderón, pero sin tener éxito.

Hace tres años sufrió una embolia que afectó drásticamente su vida, al quedarse sin trabajo y no poder mantener a su familia integrada por su esposa y su hija.