Sevilla se convirtió en el rey absoluto del Viejo Continente al derrotar 3-1 al Liverpool y ganar la Europa League en Basilea. Un título que vuelve histórico al club español en este tipo de competencias.
Este campeonato es el quinto en la historia del club, antes en 2006, 2007, 2014 y 2015; y el tercero de forma consecutiva; y les dio la oportunidad de jugar la fase de grupos de la Champions League.