Removerán vegetación del río Santa Catarina; alertan por inundaciones ante llegada de huracán

Para prevenir un posible desbordamiento en su cauce, autoridades locales anunciaron el retiro de vegetación en la cuenca del Río Santa Catarina, en Monterrey.

En conferencia de prensa, Hernán Villarreal, titular de Movilidad, así como Luis Carlos Alatorre, director regional de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) señalaron que durante los próximos días se implementará un plan que removerá la vegetación a lo largo de 24 kilómetros del río, desde Guadalupe hasta San Pedro.

De acuerdo con los funcionarios, la presencia de vegetación en la zona sería perjudicial en caso de presentarse fenómenos meteorológicos intensos, tales como lluvias torrencial o un posible huracán, ya que en algunas zonas se reporta una obstrucción de hasta el 90 por ciento del cauce.

Esto se debe, entre otras cosas, a la acumulación de maleza, escombro, árboles y piedras en la cuenca del río, misma que ha permanecido inalterada desde hace más de diez años.

“Estamos tomando acciones para salvaguardar a la sociedad en caso de que haya un huracán (…) Hay tantos árboles que el río perdió la afluencia del agua en un 90 por ciento; cuando avance el agua tendríamos inundación en los laterales, y al retirar la vegetación selectiva habría menos inundación“, precisó Alatorre.

‘Limpieza’ del río costará 100 millones de pesos

Los funcionarios aseguraron que el proyecto cuenta con la aprobación de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y de la propia Conagua,  y que su ejecución requerirá una inversión de aproximadamente 100 millones de pesos, repartidos entre fondos estatales y federales.

Trascendió que cierta vegetación podrá permanecer en el sitio a pedido expreso de asociaciones ambientalistas, aunque no se emitieron detalles en torno al protocolo que se utilizará para protegerla, ya que los trabajos requerirán la intervención de maquinaria pesada.

El programa comenzará a aplicarse durante los próximos días, toda vez que las autoridades buscan que la zona está despejada a tiempo para la temporada de lluvias, misma que se espera para finales de julio en Nuevo León.