Propone AMLO ante Celac integración de Latinoamérica parecida a la Unión Europea

Propone AMLO ante Celac integración de Latinoamérica parecida a la Unión Europea

Ante cancilleres de la Celac, López Obrador propuso lograr una integración de Latinoamérica como la de la Unión Europea y sin EE.UU.

Ante cancilleres de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), el presidente Andrés Manuel López Obrador propuso lograr una integración como la de la Unión Europea —sin el intervencionismo de Estados Unidos— apegado a la realidad histórica de los pueblos.

Al conmemorar el 238 natalicio de Simón Bolívar en el Castillo de Chapultepec, planteó sustituir la Organización de Estados Americanos (OEA) “por un organismo verdaderamente autónomo, no lacayo de nadie”.

Tras Destacar que es una hazaña que Cuba ha resistido durante 62 años al bloqueo, propuso que se le entregue “el premio de la dignidad, y esa isla debe ser considerada como la nueva Numancia por su ejemplo de resistencia y pienso que por esa misma razón debiera ser declarada patrimonio de la humanidad”.

Acompañado de su esposa la doctora Beatriz Gutiérrez, la escritora Isabel Allende, la jefa de gobierno de la ciudad de México, Claudia Sheinbaum e integrantes de su gabinete, el primer mandatario aseveró que el modelo impuesto de convivencia en América está agotado.

Por ello consideró que existen condiciones inmejorables para tener una mayor integración económica en la que México tiene experiencia tras firmar el tratado comercial con Estados Unidos y Canadá en 1994 y ahora con el T-MEC.

“Obviamente no es poca cosa tener de vecino a una nación como Estados Unidos, nuestra cercanía nos obliga a buscar acuerdos y sería un gran error ponernos con Sansón a las patadas, pero al mismo tiempo tenemos poderosas razones para hacer valer nuestra soberanía y demostrar con argumentos sin balandronadas que no somos un protectorado, una colonia o su patio trasero, además con el paso de tiempo poco a poco se ha ido aceptando una circunstancia favorable a nuestro país, el crecimiento desmesurado de China ha fortalecido en Estados Unidos la opinión que debemos de ser vistos como aliados y no como vecinos distantes”, argumentó.

Recordó que le expresó a su homólogo estadounidense, Joe Biden, la importancia de la integración económica con dimensión soberana con Estados Unidos y Canadá para hacerle frente al crecimiento exponencial de China.

“Para decirlo en otras palabras nos conviene que Estados Unidos sea fuerte en lo económico y no sólo en lo militar, lograr este equilibrio y no la hegemonía de ningún país es lo más responsable y lo más conveniente para mantener la paz en bien de las generaciones futuras y de la humanidad”, dijo.

“En 30 años para el 2051, China tendría el dominio del 64.8% del mercado mundial y Estados Unidos entre el 4% y 10% por ciento, lo cual insisto de una desproporción inaceptable en el terreno económico mantendría viva la tentación de apostar a resolver esta disparidad con el uso de la fuerza lo que nos pondría en peligro a todos”, advirtió.

El Presidente de México dijo que es mejor fortalecer económica y comercialmente a la región en lugar de apostar a la aplicación de aranceles o declarar la guerra comercial, por lo que debe analizarse abrir ordenadamente los flujos migratorios en América del Norte.

“Es ya inaceptable la política de los últimos dos siglos caracterizada por invasiones para poner o quitar gobernantes al antojo de la superpotencia, digamos adiós a las imposiciones, las injerencias, la sanciones, las exclusiones y los bloqueos, apliquemos en cambio los principios de no intervención, autodeterminación de los pueblos y solución pacífica de las controversias”, manifestó.

“Iniciemos en nuestro continente una relación bajo la premisa de George Washington según la cual las naciones no deben aprovecharse del infortunio de otros pueblos, estoy consciente de que se trata de un asunto complejo que requiere de una nueva visión política y económica. La propuesta es ni más ni menos que construir algo semejante a la Unión Europea, pero pegado a nuestra historia, a nuestra realidad y a nuestras identidades”, enfatizó.

Por ello, externo que no debe descartarse “la sustitución de la OEA por un organismo verdaderamente autónomo, no lacayo de nadie sino mediador y aceptación de las partes en conflictos en asuntos de derechos humanos y de democracia, es una gran tarea para buenos diplomáticos y políticos como los que afortunadamente existen en todos los países de nuestro continente”.

Al finalizar su discurso, dijo que sus propuestas pueden ser consideradas una utopía. “Sin embargo debe considerarse que sin el horizonte de los ideales no se llega a ningún lado y que en consecuencia vale la pena intentarlo, mantengamos vivo el sueño de Bolívar”, recalcó.

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