En su faceta de escritor Fernando decidió utilizar el apellido de su madre por lo que adoptó el seudónimo Ferma Otero. Foto: Especial

Una vida multifacética, muere Fernando Almada

Una de las últimas estrellas del cine nacional se despide a los 94 años, dejando un legado no solo en el género de acción, sino en la industria fílmica nacional

Pocos actores logran capturar el imaginario cultural como Fernando Almada, quien junto con su hermano Mario se convirtieron en los protagonistas de los westerns producidos en México durante la década de los 60 y 70. Fernando, el primero de los Almada que incursionó en el cine, murió a los 94 años de edad, así lo anunció la Asociación Nacional de Actores a través de su cuenta de X.

La ANDA publicó “La Asociación Nacional de Actores lamenta profundamente el fallecimiento de nuestro compañero Fernando Almada, miembro de nuestro sindicato. Nuestras condolencias a su familiares, amigos y compañeros. Descanse en paz”.

Actor, productor, argumentista y director Fernando nació en Hutanambo, Sonora, y durante una carrera que inició en 1959 y que se extendió hasta principios de este milenio participó en más de 150 películas entre las que destacan Todo por nada, 357 Magnum y Los Jinetes de la Bruja, donde inició junto con su hermano Mario una mancuerna icónica que será recordada por generaciones. Si bien su primer crédito lo tiene a finales de los años 50, desde niño tuvo un acercamiento al cine, cuando en 1935 participó con su hermano Mario, Manolo Fábregas y otros niños en la cinta Madre querida, dirigida por el cineasta de origen español Juan Orol.

La carrera de Fernando en la industria fílmica del mayor de los Almada inició tras el abandono de sus estudios de ingeniería en el Instituto Politécnico Nacional, donde el sonorense tomó clases de canto y vocalización. Entusiasmado por ese roce con el arte Fernando consideró dedicarse al canto, incluso participó de programas radiales como Serenatas de ayer y hoy.

Como parte de su carrera en cintas western, Fernando colaboró con reconocidas agrupaciones de la música regional mexicana, entre ellas Los Cadetes de Linares y Los Tigres del Norte, con quienes realizó las cintas La banda del carro rojo y La camioneta gris

Con esa pequeña experiencia artística, Fernando cambió la ingeniería por el canto, la música por la actuación e ingresó en la escuela de actuación de la Asociación Nacional de Actores. Su primer papel lo consiguió en 1959 en la cinta Milagros de San Martín de Porres, en la que compartió créditos con actores consagrados como Roberto Cañedo y Andrés Soler. Con Correo del Norte, su segunda película, Fernando tendría un acercamiento al género que más marcaría su carrera: los westerns y las películas de acción.

Fue en este género que tanto Fernando como su hermano Mario dejaron una huella imborrable en la historia de la cinematografía nacional. Durante la década de los 60 filmó más de media docena de filmes y tuvo la oportunidad de protagonizar junto con su hermano Mario la cinta Los Jinetes de la Bruja, en donde se consolidan como justicieros. Durante esos años él y su hermano compartieron tareas de realización en la empresa que fundaron: Producciones Almada, con la cuál realizaron múltiples filmes con éxito tanto comercial como con la crítica, entre ellas Nido de águilas y Todo o nada.

A pesar de la recaudación favorable la empresa se encontraba en problemas financieros debido a la inexperiencia de los hermanos en la administración de su proyecto. Esto los obligó a asumir diferentes roles, uno de ellos el de guionista con la película Todo o nada. La versatilidad de Fernando se puso en claro cuando en la crisis que azotó al cine mexicano durante de los 70, la producción nacional bajó a niveles alarmantes. El mayor de los Almada participó en 18 filmes con colaboraciones con Los Tigres del Norte y Vicente Fernández.

Si bien la carrera de los hermanos Almada es recordada por muchos mexicanos, esta no está carente de controversias o críticas. Su trabajo ha sido cuestionado por la calidad de sus argumentos, de sus producciones y por el contenido violento de sus cintas, en particular por los muchos videohome en los que participó al final de su carrera, allí los temas usualmente trataban de criminales y narcotraficantes. Fernando se retiró de la actuación y del ojo público a principios del siglo XX, su último crédito data del 2003 e incluso se negó a dar declaraciones tras la muerte de su hermano Mario en 2016.

Toma nota

Algunas de las películas de Fernando Almada son:

Todo por nada (1968)

357 Magnum (1981)

El Arracadas (1978)

Te puede interesar