Mentira Mentira

No todo en la vida es bonito, y para esa cara difícil de la realidad la música nos ha regalado varios géneros catárticos que sirven como soundtrack: el rock pesado, el metal, el hardcore punk y hasta el grunge… la lista es más extensa.  

El poder que tienen los riffs agresivos de guitarra acompañados de unos buenos gritos, provoca una reacción primitiva en nosotros: de ahí los empujones, el “slam” y el “moshing” en los conciertos de este tipo de música.  

No todo en la vida es bonito, y para esa cara difícil de la realidad la música nos ha regalado varios géneros catárticos que sirven como soundtrack: el rock pesado, el metal, el hardcore punk y hasta el grunge… la lista es más extensa.  

El poder que tienen los riffs agresivos de guitarra acompañados de unos buenos gritos, provoca una reacción primitiva en nosotros: de ahí los empujones, el “slam” y el “moshing” en los conciertos de este tipo de música.  

En México quizá no haya un tipo que esté más casado con esta filosofía musical que Gabriel Rey, mejor conocido simplemente como Gaby y quien es el alma del proyecto musical en solitario llamado Mentira Mentira. 

Gaby nació en Tijuana, se hizo notar en tocadas a su paso por Monterrey (en lugares que hoy ya ni existen, culpen a la inseguridad) y hoy atormenta los amplificadores con el potente sonido de su guitarra desde la Ciudad de México. 

Su show en vivo es lo más cercano que tenemos de estar en un happening seudo grunge: Gaby se apropia del escenario a base de un estruendoso sonido de pedales, distorsiones y gritos, además de interactuar e involucrar a las personas que van a escucharlo (lo hace con un muy buen sentido del humor). 

Aunque su música está diseñada para escucharse en vivo, Mentira Mentira se está haciendo de una discreta discografía que bien vale la pena escuchar. 

Sobre todo “No Way Out”, su segundo álbum. 

Después del doble lanzamiento “GASOLINE” y “MEANINGMORE” en 2011, Mentira Mentira deja un poco el crudo sonido lo-fi para escucharse un poco más pro.

Gaby homenajea al grunge a su manera, pero también tiene momentos de inspiración como en la canción homónima del disco “No Way Out”, un track que bien pudo ser influenciado por Bradford Cox y Deerhunter. 

Pero no hay un ejemplo más claro de la influencia de Nirvana que en la canción que cierra el álbum, “Lars Hetfield” –un juego de nombres entre los líderes más visibles de Metallica (Lars Ulrich y James Hetfield)–, en donde Gaby parece retomar el sonido de “Tourette’s”, la canción que cierra el álbum en vivo “From the Muddy Banks of the Wishkah” de Nirvana.

Las referencias musicales no se quedan ahí, también incluye un cover de “Blitzkrieg Bop” de The Ramones. 

“No Way Out”, como toda la música que hace Gaby, está disponible gratis en Internet en el blog de Mentira Mentira

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