Mazapanes Toledo, donde la tradición no se olvida
El negocio que actualmente atiende la tercera generación de los García Galeano sigue ofreciendo los dulces típicos españoles, además de galletas y turrones de almendra; productos 100 por ciento sin conservadores
Fernanda Muñoz[kaltura-widget uiconfid=”39952882″ entryid=”0_2hums2gn” responsive=”true” hoveringControls=”false” width=”100%” height=”56.25%” /]
Mazapanes Toledo lleva aproximadamente 80 años en el negocio de estos típicos dulces españoles. En 1939, Luis García Galeano llegó a la Ciudad de México, dejando en el país europeo a su familia y a la cultura que lo vio crecer.
Con el paso del tiempo, el nacido en Toledo, España, empezó a recordar a sus seres queridos, los paisajes de su nación y, principalmente, sus dulces, los típicos mazapanes que no dudó en comenzar a realizar en México.
Su nieto, Gabriel García Galeano, cuenta a Reporte Índigo que su abuelo tenía tanta fe en los mazapanes que él mismo hacía que decidió ir a algunas tiendas comerciales para ofrecerlos y matar dos pájaros de un tiro: darle un poquito de España a los mexicanos y ganar algo de dinero.
Cuando se dio cuenta de que sus dulces estaban dando un buen resultado para el público mexicano, abrió su propia tienda en el Centro Histórico.
Él sí se imaginó que esto crecería porque era un poco visionario, y nosotros seguimos trabajando en este negocio, preparando los mazapanes sin conservadores, de manera 100 por ciento natural. Esa es una de nuestras ventajas, asegura Gabriel García.
Cada almendra tostada, mazapán y turrón que venden en sus cuatro sucursales no debe estar más de seis meses en exhibición debido al proceso con en el que son elaborados. En 16 de septiembre, Colonia Centro, se realizan todos los productos originales para su distribución.
La idea de mi abuelo siempre fue ofrecer el mazapán porque aquí no lo había, como él llega con la Guerra Civil, con los refugiados, buscó el mismo dulce que allá consumían.
Los primeros mazapanes que pusieron a la venta fueron los clásicos, pequeños trozos de masa elaborada con miel y azúcar; las peladillas (nueces cubiertas con un ligero glas de azúcar) y los turrones. Los pasteles rellenos de dulce de leche y los panqués llegaron años después.
Las galletas las empezamos a vender porque mi hermano aprendió la receta, se la platicó a mi papá y él aceptó (…) Gracias a Dios todas las propuestas que lanzamos se quedan porque le gustaron a la gente, dice García.
Mazapanes Toledo es el resultado del esfuerzo familiar, el cual nunca olvidó la receta que logró conquistar a todo el público mexicano
