MORELIA, MICHOACÁN, 25OCTUBRE2018.- Ayer por la noche Alfonso Cuarón presentó su nueva pelícual Roma, en el Festival Internacional de Cine de Morelia, el dos veces ganador del Oscar sostuvo un encuentro con medios de comunicación en el legendario Teatro Ocampo, también ofreció un master class con jóvenes en donde relató que tras una borrachera en esta ciudad decidió rodar la cinta ganadora del León de Oro en Venecia. 
FOTO: CUARTOSCURO.COM

Cuarón resalta su educación en la UNAM; “tuve la formación académica necesaria”

El cineasta se reencontró con su profesor Mario Luna y enfatizó el valor que la UNAM le otorgó para su formación como director de cine

En medio del fenómeno por la cinta mexicana “Roma”, del director Alfonso Cuarón, éste resaltó su formación académica en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) al volver a visitar el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC) donde fue formado.

El cineasta se reencontró con su profesor Mario Luna y enfatizó el valor que la UNAM le otorgó para su formación como director de cine, a pesar de que en ese tiempo existían carencias.

“Una parte de mi instinto de cineasta ya lo tenía en el CUEC; y aunque teníamos muchas carencias, era un estímulo para encontrar soluciones de otra manera”, recordó.

Cuarón también memoró sus enseñanzas aprendidas por sus profesores como Mitl Valdez, Mario Luna, Jorge Ayala Blanco, Toño Ruiz y Juan Mora, de quienes dijo son los verdaderos pilares del CUEC.

“El CUEC en esa época era una escuela muy desarticulada, pero con muy buenos maestros, y no me sorprende que los maestros sigan siendo sus pilares, porque los pilares no son los edificios”, resaltó.

El director de “Roma” explicó que sus primeras películas fueron grabadas con camaritas de cartón y “después tuve la suerte de tener una Súper 8, filmaba sin rollo, y fue una gran escuela. En el CUEC nos rolábamos, siendo staff de todos los demás, y mi formación nació justo de eso, pero no desprecio la parte académica”.

Por último, llamó a los jóvenes a no perder la creatividad ante el inmenso apoyo tecnológico, por lo que podría convertirse en una distracción.

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