Avistamientos de ovnis ¿realidad o fantasía?

Avistamientos de ovnis ¿realidad o fantasía?

Personas alrededor del mundo aseguran ser testigos de avistamientos de ovnis, sin embargo, los testimonios aún se encuentran en duda

Una de las preguntas que el hombre se ha hecho desde que descubrió que fuera de la Tierra existe el Universo es ¿estamos solos?, muchos aseguran ser testigos de avistamientos de ovnis en varias partes del mundo.

Aunque los avistamientos de ovnis se tratan de eventos ocurridos en la historia moderna, algunos escritos antiguos podrían sugerir que la observación de objetos voladores no identificados no es reciente.

Fue a partir de la época postguerra, cuando la humanidad ya había desarrollado dispositivos que surcaban los cielos, que las personas comenzaron a registrar este tipo de eventos en el cielo.

Cientos de autores, muchos de ellos serios o científicos reconocidos, han abordado en sus textos la posibilidad de que tengamos compañía en el Universo y recibamos su visita.

Visitas extraterrestres ¿realidad o fantasía?

Reportes recientes aseguran que los avistamientos de ovnis han aumentado durante la pandemia de COVID-19, que mantiene a millones de ciudadanos del mundo confinados en sus hogares.

La observación de ovnis aumentó 51 por ciento en Estados Unidos, donde parece estar la mayor parte del público para estos eventos.

El aumento es respecto a los avistamientos registrados en el mismo periodo, pero en 2019.

Según Peter Davenport, director el Centro Nacional de Informes de Ovnis desde 1994, durante la pandemia ha recibido entre 25 y 50 llamadas al día por supuestos avistamientos.

La idea de que hay vida en otros planetas no es reciente, pues Percival Lowell, astrónomo estadounidense, aseguró que los líneas oscuras vistas por Giovanni Schiaparelli, sobre Marte se trataban de canales creados por una “civilización inteligente” para llevar agua a los polos del planeta rojo.

A partir de la existencia de aparatos que volaban por el cielo los estadounidenses comenzaron a reportar la presencia de “platillos voladores”.

Los denominaron así por su similitud con los “boomerangs”, un juguete que se lanzaba entre dos o más jugadores para ser atrapado.

El más significativo de estos incidentes es el “caso Roswell”, en el que un supuesto ovni se estrelló en un rancho en Nuevo México en 1947.

El 2 de julio de 1947 Marc Brazel, un granjero de Nuevo México, reportó a las autoridades locales el hallazgo de restos de dispersos en su propiedad.

Los medios de comunicación locales especularon acerca del origen del objeto cuyos restos encontró Blazer, asegurando en sus titulares que se trataban de pedazos de un platillo volador.

Sin embargo, según una descripción del profesor emérito de Física de la Universidad de Nueva York, Charles B.Moore, se trataba de un globo meteorológico con el que EU pretendía espiar a la URSS.

El Ejército, que para entonces se había involucrado en el hecho, desmintió que se tratara de un platillo volador, y corroboró que se trataba de un globo meteorológico.

Numerosas teorías sugieren que los militares sustituyeron los restos del supuesto platillo volador por materiales como tiras de goma, papel aluminio, cartón y varillas.

Otros tantos afirman que incluso se recuperaron cadáveres alienígenas en el sitio y que estos se encuentran en poder de la milicia de EU.

Una encuesta de 1997 de CNN/Time, realizada en el 50 aniversario del incidente, encontró que el 80 por ciento de estadounidenses piensan que el gobierno oculta su conocimiento acerca de la vida extraterrestre.

En septiembre pasado, la Marina de EU aceptó que tres videos militares desclasificados entre 2017 y 2018 son acerca de “fenómenos aéreos no identificados”.

Es precisamente en la llamada “Área 51”, un emplazamiento ubicado en el estado de Nevada, donde el gobierno de EU ocultaría las evidencias de vida extraterrestre.

El sitio atrae a ciudadanos comunes y a políticos por igual. John Modesta, jefe de gabinete de Bill Clinton, aseguró que en su momento el ex mandatario solicitó información acerca de las actividades que se llevaban a cabo en el Área 51.

En 2013, la CIA desclasificó documentos en los que reconoce que el Área 51 es un sitio militar secreto ubicado a poca distancia al noreste de Las Vegas.

Sin embargo, los documentos sólo prueba que el sitio se usó para probar los programas de vigilancia aérea U-2 y OXCART, y que el secretismo que rodea el lugar se debía a la necesidad de ocultare esta información a los soviéticos.

Hasta el momento no existe evidencia sustancial, más allá de videos y testimonios de personas que aseguran han sido aducidas por extraterrestres, que pruebe la existencia de los ovnis o de seres extraterrestres.

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