Aunque Ron DeSantis es el segundo republicano más popular dentro del Partido Republicano, no puede superar a Donald Trump. Foto: Especial

Mike Pence renuncia a su campaña política por falta de respaldo social y económico

La candidatura del exvicepresidente de Estados Unidos duró solo cuatro meses, dejando a seis republicanos más en la contienda, entre ellos Donald Trump, quien lidera en popularidad

El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, tiene un competidor menos de quién preocuparse de cara a las elecciones internas del Partido Republicano.

Mike Pence, quien fue la mano derecha de Trump durante su cuatrienio, se retiró de la contienda a la presidencia por la falta de respaldo económico y social.

Fue en la convención anual de la Coalición Judía Republicana donde el exvicepresidente comentó que fue después de viajar seis meses por su país que se dio cuenta que este no era su momento.

Pence es el primero de los ocho republicanos en abandonar sus aspiraciones a las elecciones presidenciales de 2024, dejando en la competencia a Trump, Ronald DeSantis, Nikky Haley, Vivek Ramaswamy, Tim Scott, Asa Hutchinson y Chris Christie.

“Hay que reconocer su renuncia en términos de su formación política como un hombre que da la cara (…) Su salida es una muestra de su oficio político sobre todo por toda la gente que lo apoyó y metió dinero a su contienda”, opina el doctor Roberto Hernández, docente de Relaciones Internacionales de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán, de la Universidad Nacional Autónoma de México.

De acuerdo con Hernández, desde un inicio Pence comenzó su campaña cuesta arriba al tener a Trump como contrincante, pues en ningún momento se alcanzó a ver qué lo diferenciaba del expresidente, imposibilitándolo a formar su propia candidatura.

A través de un análisis hecho por el blog estadounidense FiveThirthyEight, se demuestra que las intenciones de voto a favor de Pence iban en picada desde junio pasado, cuando anunció que participaría en las presidenciales. Mientras que el republicano comenzó su campaña con el 5.4 por ciento de la aprobación electoral, terminó con el 3.8.

La cuenta Political Polls también posicionó a Pence como uno de los republicanos con menos aceptación electoral. En su registro del 24 de octubre, la última en la que parece el político antes de su renuncia, cuenta con un 4 por ciento de popularidad; 57 puntos porcentuales menos que los que obtuvo Trump en esa fecha.

Según las encuestas, por debajo de Pence están Tim Scott, el único republicano afrodescendiente; Chris Christie, exgobernador de Nueva Jersey; y Asa Hutchinson, exmandatario de Arkansas.

“Creo que la aspiración del exvicepresidente en realidad no aportaba mayor riesgo para Donald Trump. Dentro de los republicanos hay perfiles con mayores posibilidades, aunque me parece que todo terminará en el ‘round’ de hace cuatro años: Trump contra (Joe) Biden”, remarca el internacionalista.

El rival de Donald Trump no está entre los republicanos, sino en los tribunales

Sin la participación de Mike Pence, dentro de la oposición estadounidense siguen contendiendo seis candidatos más, aunque ninguno con la visibilidad del exjefe de Estado.

A pesar de que el gobernador de Florida, Ron DeSantis, es quien más posibilidades tiene de enfrentar a Trump en el último momento por ser el segundo republicano con mayor popularidad, el verdadero rival del exmandatario está dentro de los tribunales, de acuerdo con el doctor Rodríguez.

“Como se puede ver en las encuestas, es muy difícil que alguien le arrebate la candidatura a Trump porque su rival realmente no está dentro del Partido Republicano, sino en los tribunales. Tendremos que ver si puede superar esa carrera llena de obstáculos”, detalla el docente.

El expresidente se enfrenta a por lo menos seis demandas individuales, dos relacionadas a sus finanzas y la de su familia, una en materia de seguridad nacional y dos más por los resultados de las elecciones de 2020.

Una de las investigaciones que sigue en pie contra el republicano es la relacionada con el papeleo en Mar a Lago, donde se hallaron papeles confidenciales que le pertenecían a la Casa Blanca, pero que el exmandatario se llevó a su residencia de Florida.

Trump también está acusado de influir en sus electores para asaltar el Capitolio en enero de 2021, de fraudes fiscales dentro de su compañía, y hasta de haber abusado sexualmente de una mujer en la década de los 90, entre otros casos más.

Ante el escenario legal al que se enfrenta Trump, el expresidente podría seguir usando sus campañas políticas para defenderse y acusar al oficialismo de supuestamente montar casos en su contra para perjudicarlo políticamente.

En los partidos de Estados Unidos  ”lo que se deja ver es que no hay un cambio generacional”

Con las altas posibilidades que tiene el republicano de volver a enfrentarse con el actual presidente para 2024, el internacionalista de la FES Acatlán lamenta que en los dos únicos partidos de Estados Unidos no haya habido un cambio en los últimos cuatro años.

Desde su punto de vista, tanto el Partido Republicano como el Demócrata están viviendo una crisis de liderazgo al arrojar a los mismos candidatos a la presidencia.

“En ambos partidos lo que se deja ver es que no hay un cambio generacional, no hay una figura joven, no hay políticos que hayan crecido. Del lado demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris era la lógica sucesora, pero lo que vemos es que su papel ha resultado decepcionante, tanto que ni siquiera se postuló”, señala el docente.

Aunque dentro del oficialismo hay inscritos tres candidatos además de Biden, ninguno tiene la misma intención de voto que el presidente. Según el portal Politics Polls, mientras que el mandatario cuenta con el 70 por ciento de aceptación, en segundo lugar, Marianne Williamson, con el 9.

No será sino hasta enero próximo que las elecciones internas den comienzo, alargando la contienda hasta mediados de 2024 para dar a conocer a los políticos que se enfrentarán para quedarse en la Casa Blanca.

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