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En el último año, el Futbol Club Barcelona ha vivido problemas extracancha que amenazaron con desequilibrar al primer equipo
Es momento de hacer “compras de pánico” y amarrar a los jugadores que tenían apalabrados, porque dentro de poco, el Barcelona no podrá sumar nuevos elementos a su plantilla.
FIFA rechazó la apelación que había presentado el equipo español y no podrá fichar jugadores cuando se cierre el actual período de transferencias.
El Barcelona ya anunció que recurrirá la sanción al Tribunal de Arbitraje del Deporte(TAS). Tras confirmarse que el club azulgrana no podrá contratar a nadie la próxima temporada, se alimenta la posibilidad de fichar de forma adelantada a jugadores como Reus del Borussia Dortmund; o Koke, del Atlético de Madrid, que llegarían esta misma campaña.
La raíz del problema
La Comisión Disciplinaria de FIFA, sancionó al equipo y a la Real Federación Española de Futbol (RFEF) por “Infracciones relacionadas con el traspaso y a la inscripción de jugadores menores de 18 años”.
Las sanciones fueron impuestas por el Transfer Matching System (TMS), una filial de la FIFA cuyo objetivo es controlar los traspasos de futbolistas, garantizar la legalidad de los mismos y proteger esas actividades.
El TMS es, además de una aplicación informática de FIFA, el órgano encargado de investigar los casos que vulneren el reglamento y, en caso necesario, comunicarlo a la Comisión Disciplinaria.
Las investigaciones se dieron sobre varios menores inscritos en campeonatos durante los años 2009 y 2013, algunos de los nombres de los jugadores serían Theo Chendry, Paik Seung Ho, Bobby Adekayne y Patrice Sousia.
A inicios del 2013, Barcelona recibió a través de la Federación Catalana un comunicado en el que la FIFA le prohibía alinear a Lee Seung Woo, delantero coreano y quien es una de las mayores promesa de la cantera, por incumplir el articulo 19 del reglamento sobre el estatuto de tranferencias de los jugadores.
El comunicado del Barcelona
La entidad catalana emitió un comunicado en el que defendía sus intereses, y avisó que recurrirá al TAS.
“Ante la resolución dictada por el Comité de Apelación de la FIFA por infracciones relacionadas con el traspaso y la inscripción de jugadores menores de 18 años, el FC Barcelona comunica que continuará defendiendo sus intereses ante las máximas instancias jurídicas deportivas, en este caso frente al Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS).
El FC Barcelona no puede compartir de ninguna manera una resolución que atenta contra el espíritu de nuestra Masia, un ejemplo de formación académica, humana y deportiva, reconocida mundialmente”, decía el comunicado oficial del Barcelona.
Los azulgrana aún no se dan por vencidos, y continuarán la pelea por no tener que afrontar el próximo torneo sin nuevos refuerzos.
Problemas extracancha
En el último año, el Futbol Club Barcelona ha vivido problemas extracancha que seriamente amenazaron con desequilibrar al primer equipo. Este es un recuento de los “otros” rivales que han tenido que driblar los azulgrana fuera de la cancha, además del ya conocido tema de la sanción de FIFA que enfrentarán dentro de poco.
Hacienda vs. Lionel Messi
Lionel Messi ha tenido que encarar una persecución de Hacienda. El astro y su padre debían a este organismo, entre el 2006 y el 2009, casi 4 millones de euros (5 millones de dólares), y tres declaraciones complementarias desde el 2011 al 2013. Al final Messi tuvo que abonar cerca de 53 millones de euros (70 millones de dólares) a Hacienda para evitar “daños mayores” y dejar la deuda saldada.
Conflictos presidenciales
Una auditoría al club azulgrana destapó que Joan Laporta, expresidente del equipo, había tenido perdidas por 70 millones de euros (92 millones de dólares) en una temporada. Previamente había asegurado que las cuentas azulgranas presentaban un superávit.
Muchos de estos gastos fueron privados, en comidas entre directivos y fuera de gastos del club. Fue poco después de las elecciones a la presidencia y Joan Laporta perdería las elecciones a favor del que había sido su amigo y mano derecha Sandro Rosell.
El caso Neymar
Tiempo después, sería Sandro Rosell el que tendría que dar cuentas por el fichaje de Neymar. Fue a principios de este mismo año cuando la presión acabó con él y tuvo que dejar su puesto a Josep María Bartomeu, la razón, la denuncia de un socio del club que buscaba investigar el verdadero precio de Neymar.
El brasileño, que en un principio costó 57 millones de euros (75 millones de dólares), en verdad había costado 89 millones de euros (118 millones de dólares), e incluía partidos contra el Santos por un precio desorbitado.
