Desde el 2012, los padres mexicanos tienen como prestación la conocida “licencia de paternidad”, pero es fecha que no existe información confiable para saber si este derecho se está respetando por parte del sector patronal.
El permiso de paternidad –que conlleva otorgarle a los papás cinco días con goce de sueldo a partir del nacimiento de un hijo–, enfrenta resistencias principalmente de los patrones.
Este derecho se ha vuelto invisible debido a que quienes llevan el registro son los jefes o las empresas, no una institución de interés social como es el caso de las mujeres.
Azaneth Cruz