El nuevo desafío para la administración de Trump es que en octubre alcanzará su límite de préstamos establecido por la ley, por lo que pidió al Congreso subir el techo de deuda antes de que eso ocurra.
Pero en caso de que no lo logre, hay un plan que evalúa el secretario del Tesoro, y que es el mismo que diseñó la administración de Obama en 2011, cuando tuvo que priorizar unos pagos sobre otros, según la agencia Bloomberg.
En términos del exsecretario del Tesoro, Jacob Lew, equivaldría a un “default con otro nombre”.
Lourdes González