Que lo hagan los maestros

Serán los propios maestros quienes se encarguen de corregir los 117 errores que fueron detectados en los libros de texto gratuitos que recibirán los alumnos de primaria el próximo ciclo escolar, 2013-2014.

La Secretaría de Educación Pública (SEP) anunció ayer que en la reunión de planeación académica –una semana previa al inicio de clases– entregará a los docentes una fe de erratas para que ellos subsanen los errores en los libros de texto.

234
millones de libros con fallas ortográficas serán distribuidos
"No es lo mejor; no estamos contentos con ello, pero no teníamos una alternativa distinta”
Alba Martínez OlivéSubsecretaria de Educación Básica

Serán los propios maestros quienes se encarguen de corregir los 117 errores que fueron detectados en los libros de texto gratuitos que recibirán los alumnos de primaria el próximo ciclo escolar, 2013-2014.

La Secretaría de Educación Pública (SEP) anunció ayer que en la reunión de planeación académica –una semana previa al inicio de clases– entregará a los docentes una fe de erratas para que ellos subsanen los errores en los libros de texto.

Alba Martínez Olivé, subsecretaria de Educación Básica, aseguró que antes de tomar esta decisión estaban ante una disyuntiva de cancelar la distribución de los libros y dejar a maestros y alumnos sin esta herramienta, o trabajar a lo largo del ciclo escolar para que los errores puedan ser subsanados dentro de las aulas por los profesores y el acompañamiento de la SEP.

La funcionaria manifestó su preocupación porque se esté entregando una generación de libros que tienen defectos, y reconoció que, aunque no es la mejor opción, la decisión que se tomó es la única alternativa que quedaba.

“No es lo mejor; no estamos contentos con ello, pero no teníamos una alternativa distinta”, recalcó.

Castigo por error

El lunes, diputados locales del Partido de la Revolución Democrática (PRD) solicitaron a la Secretaría de la Función Pública que imponga las sanciones por las fallas ortográficas halladas en libros.

Solicitaron a la dependencia federal que investigue y realice una auditoría al proceso de elaboración de los casi 234 millones de libros de texto, para fincar responsabilidades a los servidores públicos que no desarrollaron su trabajo de manera adecuada.

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