México refuerza seguridad en frontera sur… como Donald Trump en el norte

Tras reunirse con Manuel Velasco, gobernador de Chiapas, Alfonso Navarrete Prida, titular de la Secretaría de Gobernación, anunció el envío de elementos de la Gendarmería de la Policía Federal a los límites de nuestro país con Centroamérica

Luego de que Donald Trump, presidente de Estados Unidos, desatara la tensión tras anunciar el reforzamiento de seguridad en la frontera con México, la Secretaría de Gobernación, a cargo de Alfonso Navarrete Prida, confirmó acciones similares en los límites de nuestro país con Centroamérica.

Luego de reunirse con Manuel Velasco, gobernador de Chiapas, el secretario de Gobernación confirmó que elementos de la Gendarmería de la Policía Federal serán enviados a la frontera sur.

A través de un Facebook Live, Manuel Velasco habló al respecto, y señaló que el reforzamiento se realizará “privilegiando en todo momento un trato digno, un trato humano, a nuestros hermanos y hermanas migrantes”.

También Navarrete Prida indicó que el reforzamiento de los límites será respetuoso de los Derechos Humanos.

El inicio de la tensión se originó cuando Donald Trump, mandatario estadounidense, se enteró de la existencia de la caravana ‘Viacrusis Migrante’, de la que formaban parte cientos de ciudadanos centroamericanos que recorrían México para evidenciar los peligros a los que se enfrentan todos aquellos que buscan el ‘sueño americano’.

Trump recriminó la presunta falta de acciones de autoridades mexicanas para hacer frente a la situación, y confesó temer que los migrantes trataran de cruzar hacia su país.

Fue entonces que el magnate amenazó con militarizar la frontera.

Políticos mexicanos, incluidos los integrantes del Senado de la República, rechazaron los dichos del magnate; colaboradores de la Casa Blanca tuvieron que realizar precisiones e indicar que la seguridad correría a manos de elementos de la Guardia Nacional, quienes vigilarían y no estarían armados.

La caravana se dispersó tras pasar algunos días detenida en Oaxaca; algunos de los centroamericanos recibieron permisos de hasta 20 días para dejar México.

Los últimos rastros del grupo de migrantes se encuentran en la Ciudad de México, donde terminan formalmente sus actividades.

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