Han sido dos años complicados y de altibajos desde que Mario Delgado asumió la presidencia de su partido en noviembre de 2020

Mario Delgado asegura que el dinosaurio del PRI se irá en 2023

A pesar de ser un año complicado, Mario Delgado, se dice satisfecho de lo que consiguió Morena en 2022, prevé una victoria en el Edomex y Coahuila para el próximo año y les desea a las ‘corcholatas’ que antepongan su ambición al proyecto de nación ‘que les vaya bien’

En entrevista con Reporte Índigo, Mario Delgado, presidente nacional de Morena, hace un balance de este año y habla sobre las proyecciones que tiene el partido para el 2023 y el 2024.

El líder del partido guinda confía en que sacarán al “dinosaurio” del PRI en las elecciones de Coahuila y el Estado de México y seguirán dando batalla para materializar la reforma político-electoral del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Sobre las fracturas internas y las aspiraciones personales de varios miembros del partido para colarse en la sucesión presidencial y en otros puestos de poder, Delgado les dice que deben aceptar la voluntad del pueblo, y de no ser así, se pueden ir de Morena.

Han sido dos años complicados y de altibajos desde que Mario Delgado asumió la presidencia de su partido en noviembre de 2020, a su paso no solo ha renovado las bases y estatutos de Morena, ganado 16 de 21 gubernaturas, sino que ha sentado las bases del instituto político que busca permanecer en el poder durante los próximos años.

“Como el movimiento es plural, habrá de todo, habrá gente que le guste (mi dirigencia) y a las que no, pero en la política los resultados cuestan y cuentan”, comenta en entrevista a Reporte Índigo.

-El próximo año será de vital importancia para Morena, política y electoralmente, ¿Cómo ves la fuerza del partido en Coahuila y el Estado de México?

“Nuestro pronóstico es que los dinosaurios del PRI se van a extinguir en 2023. No serán batallas fáciles, por eso debemos de recurrir a nuestra fortaleza que es la organización con la gente, la fuerza de Morena es el pueblo organizado”, dice.

Para el próximo año estarán en juego las gubernaturas de Coahuila y el Estado de México, dos entidades históricamente gobernadas por el tricolor y que no han conocido la alternancia

En el caso del Edomex, Delgado dice estar seguro de que Delfina Gómez se alzará con la victoria ya que es una política muy querida, reconocida y que ya padeció un fraude electoral.

“No hay mexiquense que aguante un siglo de priismo, sobre todo un priismo que representa lo peor del priismo en la historia, mucha corrupción y ahora el saldo del Estado de México es de mucha violencia y desigualdad”, opina.

Sobre Coahuila, dice que también ganarán, aunque confiesa que el principal “enemigo” podría estar dentro del mismo partido, haciendo referencia al subsecretario de Gobernación, Ricardo Mejía, quien criticó que el senador Armando Guadiana se convirtiera en el alfil del movimiento guinda.

“En algunos compañeros faltó visión y compromiso con el proyecto, sacaron el cobre, les ganó la ambición y están provocando división al interior del movimiento y además, no sé si consciente o inconscientemente, ayudándole al Gobierno que supuestamente dicen combatir, cuando deberíamos de cerrar filas para conseguir el triunfo.

“Aún así con todo y la división interna tenemos grandes posibilidades de ganar porque la gente sí está con Morena”, agrega.

En Coahuila, Mario Delgado lamenta que a Ricardo Mejía le haya “ganado la ambición” y que no aceptara la victoria en el proceso interno de Armando Guadiana

Hemos visto, conforme pasan los años, que el partido más afectado del crecimiento de Morena es el PRI, aún así, “Alito” Moreno, dirigente nacional del PRI,  prometió que ganarían en 2023 las dos entidades ¿qué opinas al respecto?

“Nosotros vamos por la dos, es nuestro compromiso y tienen la misma prioridad. Nos gustaría mucho terminar el 2023 dejando al PRI sin ninguna gubernatura. Él (Alejandro Moreno) tiene un perfil de alguien que le gusta mucho hablar, pero la verdad es que le ha ido mal contra Morena, le hemos ganado 10 gubernaturas y le vamos a ganar otras dos”, lo reta.

Mario Delgado habla sobre la sucesión y posible fractura

El 2023 también es la antesala para el 2024 ¿En qué crees que se deba de trabajar para que la contienda por la sucesión presidencial no manche la vida interna del partido? ¿Consideras que las ‘corcholatas’ que no sean elegidas deben apoyar una candidatura en común?

“Está claro que la gente quiere que continúe este movimiento y que somos el partido con mayor preferencia electoral. Para ganar necesitamos unidad, que vayamos todos juntos y que no implosionemos dentro del movimiento, que no gane la ambición personal.

“Hay un proceso muy claro y transparente, la gente va a elegir al candidato o candidata a través de las encuestas, como se decide en Morena, porque no es solo un método de selección, es mucho más profundo. Que el pueblo tenga la posibilidad de decidir es lo que nos hace que tengamos tanta preferencia y que la gente confíe en Morena”, opina.

Mario, y ¿qué pasará si alguna ‘corcholata’, no quiere aceptar el resultado de la elección interna para la sucesión presidencial?

“Si alguien decide abandonar el movimiento se va a ir y no por alguna causa del partido, será porque le gana la ambición personal.

“Aquí se está por convicciones, aquí se está por el proyecto de la transformación, por continuar con el legado del presidente López Obrador. Quien no coincida en esto, quien crea que su ambición, por legítima que sea, es más importante, pues que le vaya bien”
Mario DelgadoPresidente nacional de Morena

A pesar de este posible escenario futuro, Mario Delgado se dice satisfecho de su presente y de lo que le dejó el 2022.

Defenderemos la reforma

Sobre el Plan B de la reforma electoral del presidente Andrés Manuel López Obrador que avanzó en el legislativo antes de que terminara el periodo ordinario de sesiones y al amague de la oposición y del senador Ricardo Monreal de que la llevarían a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Delgado dice que la defenderán durante el próximo año.

“Vamos a defender la reforma que se hizo porque es constitucional, es una gran mentira que tenga vicios de constitucionalidad. Ese fue el pretexto, la excusa y la estrategia de los conservadores y de la oposición, pero es una buena reforma”, opina.

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