Los oscuros métodos del PT
Las acusaciones que pesan sobre el alcalde petista de Álvaro Obregón en Michoacán, ponen nuevamente bajo la lupa los manejos del Partido del Trabajo, que desde su creación, hace más de 25 años, ha dado más de que hablar por sus escándalos que por su propuesta política.
Juan Carlos Arreygue Nuñez, presidente municipal de Álvaro Obregón, se encuentra en prisión preventiva acusado por homicidio calificado, por su presunta participación en el asesinato de 10 personas, cuyos cuerpos calcinados fueron encontrados en el municipio de Cuitzeo.
Carlos SalazarAl momento de su detención, los Abarca Pineda contaban con al menos 90 propiedades a lo largo del país y un centro comercial con valor aproximado de 300 mdp
Las acusaciones que pesan sobre el alcalde petista de Álvaro Obregón en Michoacán, ponen nuevamente bajo la lupa los manejos del Partido del Trabajo, que desde su creación, hace más de 25 años, ha dado más de que hablar por sus escándalos que por su propuesta política.
Juan Carlos Arreygue Nuñez, presidente municipal de Álvaro Obregón, se encuentra en prisión preventiva acusado por homicidio calificado, por su presunta participación en el asesinato de 10 personas, cuyos cuerpos calcinados fueron encontrados en el municipio de Cuitzeo.
El alcalde michoacano buscó en 2015 la postulación para este municipio a través del Partido de la Revolución Democrática, sin embargo, el partido del Sol Azteca declinó sus aspiraciones, por los señalamientos que pesaban sobre él, debido a sus posible vínculos con la delincuencia organizada.
El Partido del Trabajo, sin embargo, hizo caso omiso a la sombra de sospecha que se cernía sobre Arreygue y le abrió las puertas a la candidatura, pues vieron en él la posibilidad de ganar la alcaldía, el fin justifica los medios.
Tras la detención del edil michoacano, junto con el director de Seguridad Pública municipal y 3 efectivos policiacos más, el gobernador de la entidad, Silvano Aureoles aseguró que se contaba con indicios de que Arreygue habría participado en el crimen.
Además, el mandatario estatal señaló que cuando el alcalde petista pretendió la candidatura por parte del PRD, el partido solicitó información al Cisen y a la PGR, donde se confirmó que había indicios de vínculos de él con la delincuencia organizada.
Por su parte, el presidente estatal del Partido del Trabajo, Reginaldo Sandoval, acusó que la lamentable tragedia de Cuitzeo se ha politizado, en lo que es un tema más de confrontación política por parte del Gobierno estatal.
De igual forma, el dirigente desmintió lo señalado por Aureoles, ya que asegura que la razón por la cual Arreygue no fue abanderado perredista fue por una falta de acuerdos en la conformación de la planilla.
Sumado a ello, Sandoval apunta a que el PRD nunca informó posibles vínculos con el crimen organizado del ahora acusado, y que incluso, Arreygue pasó los filtros de PGR, Cisen y Segob en la investigación que se realiza a los candidatos.
Sin embargo, en el municipio michoacano, la sospecha de los nexos de Arreygue con la delincuencia organizada vienen de tiempo atrás, incluso hay señalamientos periodísticos que apuntaban en esta dirección desde antes de los hechos en Cuitzeo.
Alcaldes petistas
Fungieron como presidentes municipales abanderados por el PT, y los tres han pisado la cárcel -dos continúan tras las rejas- acusados por presuntos vínculos con la delincuencia organizada.
Juan Carlos Arreygue Nuñez, presidente municipal de Álvaro Obregón, Michoacán, está en prisión preventiva acusado por homicidio calificado, por su presunta participación en el asesinato de 10 personas.
José Luis Abarca, exalcalde de Iguala, Guerrero, y su esposa, María de los Ángeles Pineda, son señalados como los autores intelectuales del presunto asesinato de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.
Acusados de colusión con Guerreros Unidos.
Gregorio Sánchez, quien fuera Presidente municipal de Benito Juárez, Quintana Roo, fue detenido por la PGR por acusaciones de tráfico de indocumentados, lavado de dinero y crimen organizado.
Abarca y Greg, con la bendición petista
El caso del Presidente municipal michoacano, guarda similitud con los casos del ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca, y el ex candidato a la gubernatura de Quintana Roo, Gregorio Sánchez, ambos, impulsados por el PT en alianza con el PRD.
Tanto José Luis Abarca, como su esposa, María de los Ángeles Pineda, han sido señalados como los autores intelectuales de la desaparición y presunto asesinato de los 43 estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa, entre el 26 y 27 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.
Ambos están acusados de colusión con la célula criminal de Guerreros Unidos, una escisión del ya desaparecido cártel de los Beltrán Leyva en la entidad, incluso los hermanos de María de los Ángeles
Pineda ostentaban el liderazgo de este grupo delictivo.
Abarca fue postulado en 2012 por la coalición PRD, PT y Movimiento Ciudadano a la alcaldía de Iguala, a pesar de las sospechas de nexos con el crimen organizado que pesaban sobre él y su esposa, incluso hubo señalamientos directos que fueron ignorados.
Los Abarca Pineda contaban, hasta el momento de su detención, con al menos 90 propiedades a lo largo del país, centros joyeros y el centro comercial Galerías Tamarindos, con un valor aproximado de 300 millones de pesos.
En abril de 2010, el entonces Presidente municipal de Benito Juárez, Gregorio Sánchez Martínez pidió licencia de su cargo para presentarse como candidato a la gubernatura de Quintana Roo, de la mano del PRD, el PT y Convergencia.
Sin embargo, en mayo del mismo año, en plena campaña electoral, fue detenido por elementos de la Procuraduría General de la República en el Aeropuerto Internacional de Cancún por acusaciones de tráfico de indocumentados, lavado de dinero y crimen organizado.
Un año después recobró su libertad, sin embargo esto no hizo que cesaran las sospechas sobre su fortuna personal y sus vínculos con grupos delictivos.
Gregorio Sánchez se afilió al PT cuando salió del penal de Nayarit, donde cumplía su condena, y buscó una diputación local en Quintana Roo en 2013, aunque no la alcanzó.
El polémico Greg puso al servicio del Partido del Trabajo, en sus años de militancia, no solo importantes recursos económicos, sino la estructura de su asociación civil, que el PT, a pesar de los señalamientos sobre Sánchez, siempre aceptó con gusto.
Partido unipersonal
El Partido del Trabajo, desde su fundación en 1990, ha sido dirigido por una sola persona, Alberto Anaya, quien además se ha rodeado de sus más allegados, empezando por su esposa, para controlar el Consejo Político Nacional, el máximo órgano del partido.
Este grupo reducido, encabezado por Anaya, tiene el control de los candidatos, presupuestos, coordinaciones parlamentarias, puestos directivos y, lo más importante, el reparto de los recursos federales y estatales que otorga el órgano electoral.
Según datos del propio Instituto Nacional Electoral, tan solo de 1997 a 2015, el Partido del Trabajo recibió más de 4 mil millones de pesos en prerrogativas, recursos a discreción del máximo dirigente petista.
Aunque dicho presupuesto es menor en comparación al de otros partidos, luce excesivo si se compara con las aportaciones políticas que ha hecho el PT a nuestro país, un partido que ha vivido a expensas de alianzas y que hace un año estuvo a punto de perder su registro, y que sin embargo, ahora, sigue viviendo del presupuesto.