La aceitada maquinaria perredista
El PRD es una mina de oro. Durante los próximos tres años no solo tendrá el control de la Jefatura de Gobierno del DF, 14 delegaciones y 34 curules locales, sino una millonaria partida presupuestaria.
Por eso, la mira de las tribus perredistas está concentrada, tanto en formar parte del gabinete del jefe de gobierno electo, Miguel Ángel Mancera, como en quedarse con la dirección local del PRD.
La histórica votación de un 39% que obtuvo el Sol Azteca en la capital en las elecciones del 1 de julio pasado le permitirá disponer de 330 millones de pesos en puras prerrogativas.
Jonathan VillanuevaEn la sesión de hoy, el IEDF aprobará el acuerdo por el cual se reparten las prerrogativas de los partidos políticos con representación en la ciudad
La histórica votación de un 39% le permitirá disponer de 110 millones de pesos en 2013, 2014 y 2015, casi el doble de lo que recibía hasta ahora
El PRD es una mina de oro. Durante los próximos tres años no solo tendrá el control de la Jefatura de Gobierno del DF, 14 delegaciones y 34 curules locales, sino una millonaria partida presupuestaria.
Por eso, la mira de las tribus perredistas está concentrada, tanto en formar parte del gabinete del jefe de gobierno electo, Miguel Ángel Mancera, como en quedarse con la dirección local del PRD.
La histórica votación de un 39% que obtuvo el Sol Azteca en la capital en las elecciones del 1 de julio pasado le permitirá disponer de 330 millones de pesos en puras prerrogativas.
El partido podrá disponer al año de 110 millones de pesos frente a los 60 que recibía hasta ahora en los próximos tres años. En 2015, se renovarán congresos locales, el Congreso y hay elecciones a gobernador en varios estados.
El interés por el reparto
En la sesión de hoy, el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF) aprobará el acuerdo por el cual se reparte el presupuesto de los partidos políticos con representación en la ciudad en función de sus resultados en las urnas.
De acuerdo al Código de Instituciones y Procedimientos Electorales para el DF (Coipedf), el IEDF está obligado a destinar una financiación anual para los partidos políticos que se reparte según una fórmula aritmética, un 30% de subvención igual para todas las fuerzas políticas y el 70% restante dependiendo de los votos obtenidos.
Por esa razón, el monto total a repartir, en cada uno de los próximos tres ejercicios fiscales será de más de 340 millones en concepto de actividades específicas y ordinarias.
Según el proyecto de acuerdo que tiene estimado el IEDF para la sesión del Consejo General, al PRD le corresponderán 106 millones 211 mil 434.68 pesos para sus actividades ordinarias (anual), más otros 3 millones 186 mil 343.04 pesos para sus accciones específicas.
El documento, al que tuvo acceso Reporte Indigo, señala que la fuerza política que tendrá la segunda mejor tajada del presupuesto será el Partido Acción Nacional.
La proyección financiera detalla que para la formación albiazul se destinarán 68 millones 427 mil 391 pesos, tras obtener el 22.4% de la votación total.
En tercer lugar aparece el PRI, que a partir del año próximo gozará de una partida de 63 millones de pesos para sus actividades ordinarias y específicas, debido a que la votación que alcanzó fue del 20.2%.
El PT continuará siendo la cuarta fuerza política, pero con un presupuesto menor al del 2009, ya que perdió la delegación Iztapalapa, gracias al triunfo de Rafael Acosta “Juanito” y Clara Brugada.
Como consecuencia, su margen de maniobra dependerá de los 28 millones de pesos que el IEDF le proporcione hasta el próximo proceso electoral.
Nueva Alianza, el Partido Verde Ecologista de México y Movimiento Ciudadano casi están en las mismas condiciones, ya que su voto oscila entre el 4.5% y 3.5% del total.
Con lo que las prerrogativas quedarán entre los 23 y 25 millones de pesos para sus actividades propias de partido.
El pleito de las tribus
Desde finales del 2011, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ordenó renovar sus órganos de dirección partidaria ya que el Consejo Político Estatal y la dirigencia estatal habían caducado.
Por esa razón, se formaron dos bandos que buscaban apoderarse del PRD con miras al proceso electoral de julio pasado.
A partir de ese momento, se formó un bloque a favor de René Bejarano y su poderosa corriente (Izquierda Democrática Nacional) englobado en la planilla 10, mientras que los opositores fueron los marcelistas, vía planilla 22.
Solo se logró concretar la elección del Consejo Político Estatal, en medio de una división interna del PRD, en la que llegaron a arrojar despensas al Jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard en la sede del Antiguo Palacio del Ayuntamiento.
La tirantez continuó debido que ambos grupos presumían su triunfo, mientras que la elección del candidato a suceder al mandatario local estaba estancada.
Solo un acuerdo destrabó el conflicto. Consistía en que después de la elección de jefe de gobierno se instalaría el séptimo Consejo Político Estatal, para nombrar al dirigente del partido de los próximos años.
La ruta Bejarano
Una vez concluido el proceso electoral, el panorama fue completamente favorable para René Bejarano y su IDN, grupo que con el paso de los días se ha hecho con los puestos claves de la capital.
Primero, se apoderó de siete de las 16 delegaciones. Algunas en las urnas y otras a través de acuerdos entre los grupos minoritarios. Por eso hoy tiene bajo su control Álvaro Obregón, Azcapotzalco, Cuauhtémoc, Magdalena Contreras, Tlalpan, Xochimilco y ahora Tláhuac.
Posteriormente, el fortalecimiento del PRD se reflejó en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, donde ganó 17 diputaciones locales y se hizo con dos más por acuerdos de grupo.
Debido a eso, consiguió quedarse con las comisiones más importantes de la ALDF, como es el caso de Vigilancia de la Contaduría Mayor de Hacienda, Desarrollo e Infraestructura Urbana, Administración y Procuración de Justicia y Derechos Político-Electorales.
La toma de poder de Bejarano no paró ahí. También consiguió hacerse con la Tesorería de la ALDF, filtró en la disposición de los recursos financieros de ese órgano legislativo.
Y, actualmente, la dirigencia del PRD está controlada por Bejarano a través de uno de sus alfiles: Manuel Oropeza.
La política bejaranista es de crecimiento.
Por eso su lema consiste en conseguir más cargos sin dejar uno solo de los que ya tiene. Por esa razón, su grupo es el primero en levantar la mano para controlar los 110 millones de pesos que recibirá el partido anualmente.
Renovación inminente
Por acuerdo entre las tribus, el PRD renovará su presidencia a finales de este año o principios del 2013, ya que este espacio forma parte de los acuerdos nacionales.
Y es que los dirigentes metieron en el paquete del reparto de secretarías del GDF, la dirección del partido que, a partir del próximo año, tendrá un presupuesto similar al de la Secretaría de Educación, recién creada en el sexenio de Marcelo Ebrard.
En éste, como en todos los casos, se prevé un intenso forcejeo, donde todo parece inclinarse hacia el lado bejaranista.
