Las necropsias indican que los cuerpos presentan heridas de proyectil, de frente, de espaldas y de lateral. Foto: Twitter

Esto reveló la autopsia de los jóvenes masacrados en Nuevo Laredo; apunta a ejecución extrajudicial

Los estudios muestran que las víctimas, todas entre 20 y 25 años, sufrieron en total 30 heridas, se sabe que los soldados dispararon en total más de 60 veces

Hace unos días se dio a conocer el asesinato de cinco jóvenes, presuntamente a manos del Ejército en Nuevo Laredo, Tamaulipas; todo esto fue descubierto gracias a la denuncia del Comité de Derechos Humanos de la región.

El caso ha causado el repudio de la sociedad mexicana, incluso se pronunció el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), quien dijo que se investigara, mientras que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) se excusó por lo sucedido.

Este jueves se dio a conocer el informe elaborado por peritos de la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas, al cual tuvo acceso El País.

Indicios apuntan a ejecución extraoficial

En el informe se detalla que uno de los cuerpos tiene 12 heridas de bala y la cabeza destruida, otro tienen 10 heridas y la espalda y las piernas hechas pedazos, otro con un único tiro en la sien.

El informe retrata la actuación de los militares señala, que además de dejar cinco muertos, mandaron a un sexto muchacho al hospital.

Hubo dos sobrevivientes, hasta este miércoles, uno de los jóvenes seguía en coma inducido, mientras que el otro ha sido la única víctima que ha constatado lo que ocurrió la madrugada del pasado domingo 26 de febrero.

Las balas impactaron además en una vivienda cercana a la masacre, en la fachada y los cuartos interiores, donde viven cuatro adultos y cuatro menores.

Esto dice el informe de masacre en Nuevo Laredo

Se sabe que los siete jóvenes volvían de una discoteca, pasadas las 4:00 de la madrugada, cuando los militares empezaron a seguir a la camioneta donde viajaban, según ha informado la Secretaría de la Defensa (Sedena).

En un comunicado, la dependencia explicó que los muchachos aceleraron la marcha cuando vieron los vehículos militares, y esta fue una de las razones por la que empezaron a disparar.

Sin embargo, el séptimo pasajero de la camioneta, Alejandro Pérez Benítez, el único de los muchachos que resultó ileso, contó que pararon cuando se dieron cuenta de que los seguían y que fueron los militares quienes chocaron con ellos, antes de empezar a disparar.

Los jóvenes no llevaban armas ni cartuchos en la camioneta, según el testimonio del oficial castrense que se encuentra en el expediente del caso, y que realiza la Fiscalía General de la República (FGR).

Según el mando, sus hombres dispararon sin su autorización y pidió que pararan enseguida, vía radio.

Pérez Benítez también dijo que tras la primera rafaga de balas, al menos uno de los militares disparó en dos ocasiones al joven que ahora está en coma en el hospital, y que mientras los militares lo tenían sometido, pecho en tierra, escuchó al menos dos disparos más.

Militares dispararon 60 veces contra los jóvenes

Las necropsias muestran que los dos cuerpos más maltratados por las balas fueron los del conductor y su copiloto, que sufrieron 12 y 10 heridas de bala respectivamente.

Las otras tres víctimas iban en la parte de atrás de la camioneta. Una recibió cinco impactos, otra dos y la tercera, uno.

No se sabe cuántas balas impactaron en el muchacho que está en el hospital.

Alejandro Pérez y el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo denunciaron que los militares mantuvieron allí a los muchachos durante horas, antes de pedir ayuda.

Pero en el informe, los militares indicaron que la ambulancia que trasladó al muchacho herido llegó antes de las 5:20 de la madrugada.

Por su parte, la Sedena ha asegurado que los jóvenes viajaban en un vehículo sin placas, a exceso de velocidad y con las luces apagadas, además que supuestamente se negaron a detenerse.

Según esta versión, los jóvenes chocaron más adelante y al escuchar un estruendo, los militares accionaron sus armas.

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