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En pie de guerra

Los taxistas del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) están dispuestos a todo.

Ante lo que ellos consideran la amenaza de que las autoridades de la terminal aérea estén fraguando la entrada de una empresa de autotransporte para dar el servicio de taxi, se preparan para contener estas intenciones.

El sábado realizaron una asamblea con todas las organizaciones de taxistas para informar que en los próximos días interpondrán una demanda de tipo penal contra los funcionarios de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y el propio AICM.

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Los taxistas del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) están dispuestos a todo.

Ante lo que ellos consideran la amenaza de que las autoridades de la terminal aérea estén fraguando la entrada de una empresa de autotransporte para dar el servicio de taxi, se preparan para contener estas intenciones.

El sábado realizaron una asamblea con todas las organizaciones de taxistas para informar que en los próximos días interpondrán una demanda de tipo penal contra los funcionarios de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y el propio AICM.

Además de que preparan una megamarcha el próximo martes en las instalaciones del aeródromo, pretenden llevar a familiares y a todos aquellos que económicamente dependen de ellos, pues aseguran que su fuente de trabajo está amenazada.

“Nos quieren quitar el pan de la boca, el que hemos ganado con todo nuestro esfuerzo durante décadas”, dijo Carlos Tepale, líder del Sitio Nueva Imagen.

El problema inició cuando los diferentes grupos de taxistas descubrieron que el Sitio Excelencia –propiedad de exfuncionarios panistas– ha recibido trato preferencial por parte del director del AICM, Alfonso Sarabia.

Y es que se les otorgó crédito para pagar el adeudo de casi 100 millones de pesos que durante cuatro años acumularon por no pagar la contraprestación a la que estaban obligados.

“Nos quieren dar en la madre”, soltó Miguel Romero Mohar, dirigente del Sitio 300, y con esto algunos agremiados se emocionaron y empezaron a gritar en contra de las autoridades.

Los líderes dijeron a los presentes que a pesar de que el director del aeropuerto se comprometió a que el Sitio Excelencia saldría del AICM por no cumplir con sus obligaciones, esto no ha sido una realidad.

Y lo que temen es que las 300 placas que utilizan se le otorguen a la empresa El Caminante, y desechen la solicitud que ellos han hecho de que esos metales se repartan entre las asociaciones que ya existen y que han cumplido con todas sus obligaciones. 

Frente común

A pesar de que entre los diferentes sitios que participaron en la asamblea sabatina –Sitio 300, Yellow Cab y Nueva Imagen– hay diferencias y sobre todo competencia, en un hecho inédito pudieron juntarse sin pelear por un objetivo común.

El punto de acuerdo al que llegaron los casi 400 taxistas que acudieron a la cita en el Centro Cultural Venustiano Carranza fue que continuarán la lucha legal que han emprendido en contra de las autoridades, y que iniciarán una serie de movilizaciones para ejercer presión.

El martes será la primera muestra de músculo, pues los sitios aseguran que las autoridades federales quieren dejar el negocio de los taxis en manos de empresarios amigos.

El pasado 13 de marzo bloquearon el Eje Central frente a las oficinas de la SCT y cientos de granaderos los  desalojaron a golpes. Ahora los taxistas dicen que van por más. Ellos aseguran que hoy están en pie de guerra.

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