Diputados desafían a Cronos

Detener el tiempo es un poder que sólo algunos superhéroes del mundo de los cómics poseen, pero existen humanos de carne y hueso que son capaces de detener a su antojo el avance de las manecillas; son ni más ni menos que los senadores y diputados mexicanos y su famoso reloj legislativo.

Se trata de un tecnicismo creado en 2002 por la entonces presidenta de la Cámara de Diputados, Beatriz Paredes, quien decidió desafiar a Cronos y detener el reloj en medio de los cabildeos por el Presupuesto de Egresos para el año 2003.

De acuerdo a la Ley Orgánica del Congreso de la Unión, el 5 de septiembre es el último día para aprobar la instalación de la mesa, sin embargo, al haber declarado el receso en este fecha, la sesión del próximo jueves seguirá siendo la que se inició este martes.

Detener el tiempo es un poder que sólo algunos superhéroes del mundo de los cómics poseen, pero existen humanos de carne y hueso que son capaces de detener a su antojo el avance de las manecillas; son ni más ni menos que los senadores y diputados mexicanos y su famoso reloj legislativo.

Se trata de un tecnicismo creado en 2002 por la entonces presidenta de la Cámara de Diputados, Beatriz Paredes, quien decidió desafiar a Cronos y detener el reloj en medio de los cabildeos por el Presupuesto de Egresos para el año 2003.

El presupuesto debía ser aprobado, a más tardar, el último minuto del 31 de diciembre de 2012, pero los legisladores dieron el visto bueno hasta las 9:30 de la mañana del 1 de enero de 2013, lo que en teoría representa una violación a la ley.

Paredes hizo uso de su ‘superpoder’ y argumentó que el presupuesto había sido aprobado en 2012, pues la sesión había iniciado el 31 de diciembre, por lo que los legisladores aún estaban dentro del límite de tiempo; aunque para el resto de los mexicanos transcurrían las primeras horas del nuevo año.

El reloj legislativo, en pocas palabras, es una salida que los diputados y senadores utilizan para extender la fechas límite establecidas en la ley para la aprobación de determinados temas. Por ejemplo, dar banderazo al presupuesto o la integración de las mesas directivas del Congreso.

Este martes, los diputados han hecho uso nuevamente de ese ‘superpoder’ al no lograr la integración de la Mesa Directiva de la cámara baja, pues decretaron un receso y retomarán la discusión hasta el próximo jueves 7 de septiembre.

De acuerdo a la Ley Orgánica del Congreso de la Unión, el 5 de septiembre es el último día para aprobar la instalación de la mesa, sin embargo, al haber declarado el receso en este fecha, la sesión del próximo jueves seguirá siendo la que se inició este martes.

Para los diputados será 5 de septiembre los próximos días, hasta que el PAN y el PRI lleguen a un acuerdo en el tema del pase automático del procurador a la Fiscalía General, aunque para el resto de los humanos el tiempo siga su marcha normal.

El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, ha dicho que la crisis en la Cámara de Diputados podría superarse si se discute y aprueba la iniciativa presidencial que elimina el pase automático del actual procurador a la nueva dependencia.

En ese escenario, el PAN se comprometería a instalar la mesa, siempre y cuando el PRI firme que aprobara dicha iniciativa, que tiene en la congeladora desde hace varios meses, lo que daría finalmente oxigeno al Congreso de la Unión.

La situación puede empeorar en los siguientes días, pues el próximo viernes la Secretaría de Hacienda y Crédito Público debe presentar el proyecto de presupuesto para 2018 en la Cámara de Diputados, la cual podría seguir paralizada para ese entonces. 

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