Ser mexicana

¿Cuánto ha mejorado la vida de una mujer mexicana de 30 años en 2017 en comparación con una de hace tres generaciones?

De acuerdo con la Encuesta Intercensal 2015 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México hay 61.4 millones de mujeres y representan más de la mitad de la población nacional (51.4 por ciento). En términos proporcionales, la relación por sexo es de 94.4 hombres por cada 100 mujeres

¿Cuánto ha mejorado la vida de una mujer mexicana de 30 años en 2017 en comparación con una de hace tres generaciones?

De acuerdo con la Encuesta Intercensal 2015 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México hay 61.4 millones de mujeres y representan más de la mitad de la población nacional (51.4 por ciento). En términos proporcionales, la relación por sexo es de 94.4 hombres por cada 100 mujeres

La participación de las mujeres mexicanas en el mercado laboral en las últimas décadas ha representado una gran transformación política, social y económica del país.

El INEGI reporta que actualmente la participación de las mujeres es reconocida en todos los ámbitos de la vida pública, más allá del trabajo doméstico.

“A partir de los años 80 del siglo pasado, su participación en los sectores productivos creció aceleradamente, situación debida a múltiples factores de orden económico, como la necesidad de aportar al ingreso familiar ante la caída del poder adquisitivo de los salarios”, detalla. 

La participación laboral de este sector ha repotado que la población de mujeres en edad productiva (15 a 64 años) ascendió a 40.6 millones en 2015, cantidad que representa el 66.1% del total de población de mujeres.

La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) refiere que, en el tercer trimestre de 2016, 20.8 millones de mujeres de 15 y más años forman parte de la población económicamente activa (PEA) en el país. 

No obstante, las mujeres mexicanas aún ganan 16.7 por ciento menos en promedio que los hombres, resultado de varios factores como las interrupciones en la carrera profesional de las mujeres, la segregación ocupacional y sectorial en trabajos informales mal pagados, los efectos de las barreras laborales, las preferencias, limitaciones, diferencias en horas laborales remuneradas o no remuneradas y la discriminación en la contratación y los ascensos.

En México, menos de 10 por ciento de los puestos en los consejos de administración están ocupados por mujeres, es un nivel bajo en comparación con otros países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos.

En varios países se han impuesto cuotas de género para disminuir la diferencia entre hombres y mujeres en los consejos administrativos de las empresas (por ejemplo, Noruega, Bélgica, Francia, Quebec, etc.), que en su mayor parte oscilan entre 30 por ciento y 50 por ciento y, varían para las empresas públicas y privadas.

En el caso de México, esas cuotas podrían fijarse en forma voluntaria en primer lugar, y aplicarse en el sector público para empezar. Si el progreso en el sector privado es insuficiente, podría introducirse la obligatoriedad con multas en caso de incumplimiento.

El reporte menciona que las mujeres mexicanas dedican al trabajo no remunerado alrededor de cuatro horas más que los hombres por día, la diferencia más grande entre los países este organismo internacional.

Lo anterior es tan sólo un escenario que da cuenta qué significa ser mujer mexicana en el campo laboral y las diferencias de su participación en éste.

De acuerdo con la OCDE, las desigualdades entre hombres y mujeres son grandes en México aunque el país ha progresado al aumentar la participación de las mujeres de edad intermedia (25 a 54 años) en la fuerza laboral desde principios de la década de 1990, ésta sigue siendo inferior al promedio para las mujeres y considerablemente menor que la tasa de participación de los hombres mexicanos.

El 17 de octubre de 1953 con Adolfo Ruiz Cortines en la presidencia, la mujer en México se integró a la vida política del país cuando en el Diario Oficial de la Federación aparareció un decreto en el que este género tendría derecho a votar y ser votado para puestos de elección popular.

Posteriormente, bajo la administración de Adolfo López Mateos, este sector de la población volvió a ser reconocido en el país cuando el 15 de febrero de 1960 la escritora Maruxa Villalta anunció una iniciativa para conmemorar el Día de la Mujer Mexicana.

A 57 años de esta útluma fecha, ser mujer mexicana aún representa un escenario de rezagos sociales al ser un sector cada vez más vulnerable y ejemplo de ello es en el ámbito laboral en comparación con los hombres de este país.

Nota del editor: Esta información fue editada con nuevos datos a próposito del Día Internacional de la Mujer c

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