Más de 23 mil toneladas de desechos reciclables llegan a rellenos sanitarios en CDMX sin ser reusados
En la CDMX la mayoría de los residuos generados tiene un tratamiento que evita que llegue a los vertederos; sin embargo, aún llegan a los rellenos 21 mil toneladas que pueden ser recicladas
David MartínezActualmente, la Ciudad de México (CDMX) genera menos desechos y aprovecha mejor los residuos; no obstante, organizaciones sociales afirman que aún falta que la población tenga conocimiento del problema en el contexto de la situación de cambio climático que padece el mundo, México y su capital.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el cambio climático se refiere a las modificaciones a largo plazo de las temperaturas y los patrones climáticos.
“Estos cambios pueden ser naturales, debido a variaciones en la actividad solar o erupciones volcánicas grandes. Pero desde el siglo XIX, las actividades humanas han sido el principal motor del cambio climático, principalmente por la quema de combustibles fósiles como el carbón, el petróleo y el gas”, explica la ONU en su portal electrónico.
Según la ONU, uno de los factores que ocasiona el cambio climático es la gestión incorrecta de residuos, lo que provoca contaminación y genera emisiones de gases de efecto invernadero como el dióxido de carbono y el metano.
Para una recuperación #sostenible de la pandemia de #COVID-19, serán cruciales acciones tempranas en una agenda a largo plazo para:
✅ Frenar cambio climático.
✅ Evitar pérdida de biodiversidad.
✅ Combatir contaminación.
✅ Mejorar gestión de residuos.#PorLaNaturaleza pic.twitter.com/cS3zhPxDtP— Programa ONU Medio Ambiente (@unep_espanol) April 20, 2020
La situación de la CDMX
Según el Inventario de Emisiones 2022 de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México, en la capital del país se generaron por día un total de 59 mil 535 toneladas de residuos.
La Sedema menciona que, de dicha cifra, un total de 15 mil 961; es decir, el 26.8 por ciento del total de residuos generados al día, fueron reusados y reciclados. Mientras que 19 mil 617 toneladas de residuos, 32.9 por ciento, fueron acopiadas y almacenadas, es decir, son residuos que no son reciclables pero que no fueron a vertederos y se almacenaron.
Asimismo, 415 toneladas, el 0.7 por ciento de los desechos, tuvieron tratamiento y tampoco llegaron a los vertederos de basura. Y, por último, 23 mil 540 toneladas de residuos, 39.5 por ciento, fueron recolectadas y transportadas a vertederos.
Lo anterior, revela que, del total de residuos generados al día, 60.5 por ciento tuvieron algún manejo que impidió que fueran a los vertederos y rellenos sanitarios como el del Bordo de Xochiaca.
Sin embargo, es importante mencionar que la Sedema indica que la mayoría de los residuos que llegaron a vertederos, fueron inorgánicos con potencial de reciclaje.
En total, la cantidad de residuos inorgánicos con potencial de reciclaje que llegaron a rellenos sanitarios al día en 2022 ascendió a 21 mil 989 toneladas.
Mayor información, más reciclaje
En la Ciudad de México “una mayor información acerca del manejo de residuos puede ayudar a generar menos basura”, señaló a Reporte Índigo Romina Dávila, vocera de Vida Circular, iniciativa sin fines de lucro, comprometida con la promoción de la economía circular a través de espacios para compartir ideas, visiones y aportaciones en beneficio del medio ambiente.
Dávila comentó que se debe promover la cultura de la economía circular para contribuir a generar menos basura y por lo tanto menos contaminación.
“La economía circular es un modelo de producción y consumo que se basa en aprovechar al máximo las materias primas, promoviendo el reúso y el reciclaje de residuos”, detalló.
Es muy importante que los empresarios nos involucremos cada vez más en el cuidado del medio ambiente, por ello en @Coparmex_CDMX estamos muy contentos por lograr consensuar con la Cámara de @Mx_Diputados y todos los partidos la primera Ley de Economía Circular para la #CDMX. pic.twitter.com/Zf98vx08Pn
— Armando Zúñiga (@Armando_ZunigaS) April 24, 2023
La vocera de Vida Circular mencionó que cada día el consumidor está más consciente en que tiene que ser parte de la solución a los problemas ambientales que está enfrentando el mundo, y sus consecuencias como la falta de agua.
No obstante, indicó que hace falta más información para que exista un cambio de hábitos diarios que ayude a generar menos residuos.“Desde Vida Circular creemos que es muy importante que las personas tengan la información para cambios de hábitos que puedan hacer la diferencia”, comentó.
También, agregó, se debe promover la separación de residuos desde la fuente en inorgánicos y orgánicos reciclables que pueden volver a ser integrados al círculo del reúso.
“Una botella de PET puede volver a ser botella de PET si se recicla correctamente, le estamos dando una segunda vida a una botella, así con otros materiales como el cartón el aluminio”, explicó.
El Plan Basura Cero
En 2019, el Gobierno de la Ciudad de México presentó el plan Basura Cero que tiene el objetivo de promover estrategias que permitan aprovechar la mayor cantidad posible de residuos generados en la capital para evitar que terminen en sitios de disposición final como basura.
De acuerdo con el inventario de emisiones de la Sedema, se apoya en la promoción de una cultura ambiental enfocada en la prevención de la generación, consumo y uso responsable, adecuada separación desde la fuente; así como en las acciones que permitan incrementar el aprovechamiento de los residuos a través de la infraestructura adecuada y un correcto manejo.
El Plan Basura Cero ha reducido, de 2018 a la fecha, en 21% la disposición final de residuos sólidos al pasar de 8,107 ton. diarias a 6,411, lo que representa un ahorro para @GobCDMX de 904.5 millones de pesos con respecto a los 3,200 que costaba esa operación. pic.twitter.com/5SsjHwav0u
— Secretaría de Obras y Servicios CDMX (@SOBSECDMX) July 26, 2022
Asimismo, considera la importancia de mejorar las condiciones de empleo en el sector de limpia, al ser un eslabón fundamental en la cadena de manejo.
El plan tiene tres metas y ejes, el primero es que se pretende ahorrar para el 2024, un total de 8 millones 381 mil 694 pesos por disposición final de basura. La segunda es reducir a 2 mil toneladas los residuos que se envían a disposición final. Y la última, incrementar el aprovechamiento de residuos de 4 mil 100 toneladas a 10 mil 700 toneladas por persona.
‘Chacharear’, disminuye residuos
El incremento del uso de la tecnología ha hecho que también aumente la cantidad de residuos de esta índole; sin embargo, la minería urbana ayuda reducir la generación de basura electrónica, dice el Inventario de Residuos 2022 de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema).
Con minería urbana, la Sedema se refiere al reciclaje de los residuos de aparatos electrónicos donde se prioriza la extracción de los materiales en su interior, ya que al ser finitos son difíciles de encontrar. Dichos materiales abundan en el comercio de segunda mano entre los puestos que venden componentes de aparatos electrónicos.
El inventario menciona que, de acuerdo con información del Global E-Waste Monitor del 2020, elaborado por la Alianza Mundial para el Control Estadístico de los Residuos Electrónicos, señala que los residuos electrónicos pueden estar compuestos hasta por 69 elementos de la tabla periódica.
“Pueden ser aprovechados bajo un esquema de economía circular, en donde el concepto de la minería urbana toma cada vez más importancia. No obstante, los residuos electrónicos no solo están compuestos por elementos susceptibles al aprovechamiento sino también contienen sustancias como el mercurio, plomo y compuestos orgánicos persistentes, que una vez liberados causan graves problemas a la salud y al ambiente”, explica el documento.
En este sentido, el inventario de la Sedema aclara que estos residuos “deben de ser estrictamente manejados bajo las especificaciones que se describen en la normatividad”.
Por ello, indica la Sedema, en México existe la Norma Ambiental NAD-019-AMBT-2018 con el objetivo de establecer los requisitos y especificaciones para la correcta separación, almacenamiento, acopio, recolección, transporte, tratamiento, reciclaje y disposición de los residuos eléctricos y electrónicos.
“Esto a través de la responsabilidad extendida, es decir, involucrando a productores, comercializadores y distribuidores de aparatos eléctricos y electrónicos”, subraya la Sedema respecto a la norma.
