Colapso tricolor

A un par de días de la inscripción de candidatos oficiales para sus elecciones internas, el PRI enfrenta un episodio más de incertidumbre y fractura entre sus principales cuadros políticos. Un distanciamiento que debilita seriamente la credibilidad del proceso de renovación de su dirigencia nacional

Las cosas no pintan nada bien para la estructura nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), pues gracias a las recientes fracturas al interior del organismo, la credibilidad de sus elecciones internas comienza a ponerse en duda entre la propia militancia.

Y es que, a dos días del registro oficial de los candidatos que competirán para el proceso de renovación de su Comité Ejecutivo Nacional (CEN) programado para el próximo mes de agosto, diversos cuadros políticos denunciaron que no existen condiciones equitativas para realizar unas elecciones internas democráticas e imparciales, justo como lo prometió la presidenta del partido, Claudia Ruiz Massieu.

Este hecho se acentuó con la ruptura del ex secretario de Salud, José Narro Robles con el partido en donde militó por más de 46 años. Hasta este miércoles, el otrora rector de la UNAM se perfilaba como uno de los seis aspirantes para la dirigencia del CEN del tricolor, pero debido a lo que en su consideración fue una “simulación” en los procesos internos, Narro presentó su renuncia a la militancia del partido.

La salida de José Narro motivó el posicionamiento inmediato de diversos actores al interior del organismo, quienes suscribieron o se sumaron a la acción de renuncia a la militancia del partido

“Siempre he considerado a la simulación como un mal indeseable. Con esto en mente, decidí participar en el proceso de elección de la nueva dirigencia del PRI (…) pero son evidentes las muestras de que existe un preferido de la cúpula del PRI: el candidato oficial de los gobernadores y de quien fue recientemente el jefe político del partido”, explicó el exfuncionario federal a través de un video.

Y es que, desde principios del mes de junio, las principales inquietudes de los sectores priistas del país fueron el aparente favoritismo del CEN hacia el candidato y gobernador de Campeche con licencia Alejandro Moreno; la intromisión del Gobierno federal durante el proceso de elecciones internas y la invalidez del padrón actual de afiliados al organismo.

“La trampa está en el padrón, en el crecimiento desmedido de nuevos afiliados (…) ellos serán llevados a votar por quien llenará de vergüenza al partido”, sentenció Narro en su mensaje de renuncia.

Quiebre entre sectores

La salida del aspirante a un par de días de la inscripción de candidaturas –y una semana del arranque oficial de las campañas internas– complicó el panorama del tricolor y sirvió de pretexto para que varios militantes manifestaran sus inconformidades contra el instituto político; golpeando fuertemente la credibilidad del proceso interno.

La militante y escritora Beatriz Pagés, decidió aprovechar la coyuntura para presentar su renuncia al organismo tricolor, al coincidir con la visión de que el CEN está promoviendo la parcialidad y la intromisión de agentes externos –en este caso el Gobierno federal– en la elección interna.

“Al igual que José Narro, anunció mi renuncia al PRI Nacional. Es inaceptable que se haya decidido entregar el partido a Andrés Manuel López Obrador”, fue el mensaje con el que la reconocida priista justificó su ruptura.

Otro de los personajes que marcó su distancia de la contienda interna del partido fue el exgobernador de Sonora, Manlio Fabio Beltrones, quien anticipo a través de sus redes sociales que dadas las condiciones en las que se está llevando a cabo la contienda, no piensa salir a emitir su voto para la renovación de la dirigencia.

Lamento y mucho la renuncia de mi amigo José Narro al PRI. Las razones ya las expuso. En lo personal no acudiré a votar el 11 de agosto, con ese padrón irregular del que habla la convocatoria
Manlio Fabbio BeltronesExgobernador de Sonora

Asimismo, la exgobernadora de Yucatán y también candidata a la dirigencia del CEN, Ivonne Ortega, respaldó a su otrora rival en la contienda, de quien dijo coincidir con todas sus razones y suscribirlas. Sin embargo no bajó los brazos en su aspiración de conseguir la presidencia del partido para este proceso.

“No debemos rendirnos, en la lucha por el PRI no puede ganar la cúpula. Vamos con todo para recuperar al partido”, afirmó.

Manos en las elecciones internas

“La trampa, la simulación y el cochupo es lo que tiene que desaparecer del PRI”, acusó Ulises Ruiz Ortiz, exgobernador de Oaxaca y otro de los seis aspirantes a la presidencia del organismo político.

En consideración del priista, la cúpula del partido mantiene un claro favoritismo hacia Alejandro Moreno, quien representa “la ruptura” de los sectores y un vínculo permanente con el presidente López Obrador.

Una acusación que se replica entre los sectores más críticos hacia el actual proceso de renovación que está tomando el CEN a cargo de Claudia Ruiz Massieu.

Ruiz Ortiz explica que tal parece que hay un pacto entre la cúpula del tricolor y el actual Gobierno federal, con el objetivo de desaparecer al priismo del país.

Un acuerdo que no se debe permitir en virtud de que el proceso abierto y en igualdad de condiciones es la única vía para recuperar la credibilidad ante el electorado.

Se tiene que enderezar la dirigencia nacional, porque vamos hacia una fractura inminente del partido. Nos estamos jugando la destrucción o la posibilidad de seguir y recuperar la confianza. Eso es lo que está en juego
Ulises RuizExgobernador de Oaxaca

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