Azul para niño y rosa para niña, sexismo en los juguetes sigue presente

Azul para niño y rosa para niña, sexismo en los juguetes sigue presente

A pesar de los movimientos a favor de eliminar diferencias entre géneros los juguetes sexistas siguen predisponiendo a niños y niñas para asumir roles de género

Es temporada de dar, sobretodo juguetes, y niñas y niños esperan ansiosos encontrar durante la mañana del 25 de diciembre o del 6 de enero juguetes bajo el árbol que les hayan dejado Santa o los Reyes Magos, sin embargo, a pesar de que generaciones van y vienen el sexismo en los juguetes sigue presente en jugueterías y hogares.

Basta hacer un recorrido por cualquier sección de juguetes de un autoservicio o por una juguetería para demostrar que los roles de género siguen presentes desde que los niños son pequeños.

Durante años se ha asociado el color rosa a todo aquello que tenga que ver con el sexo femenino, esto se aprende desde la infancia.

Los juguetes asignados tradicionalmente a niñas se identifican por algunos de estos elementos: son color rosa o por lo menos predomina esta tonalidad, emulan alguna actividad propia de las labores del hogar (cuidar a los hijos, cocinar, barrer) y poseen a una niña en la caja.

Mientras los juguetes ‘de niños’ se caracterizan por tener colores diferentes; aunque nunca morado, rosa o azul pastel,  mostrar a niños haciendo toda clase de actividades y no sólo labores del hogar.

Así, el sexismo en los juguetes sigue presente.

Sexismo en los juguetes ¿una realidad en 2019?

A pesar de que en los últimos años, especialmente en el actual, los movimientos por la igualdad entre hombres y mujeres cobran fuerza aún falta mucho por hacer.

En el ámbito de los juguetes hay empresas que tratan de vender su producto como algo neutro sin hacer distinciones de sexo a través del color o el tipo de juego que representa en la caja.

En las páginas de supermercados que ofrecen una gran variedad de juguetes para esta temporada poseen apartados para niños y niñas.

En el apartado de niñas de la página de Walmart destacan artículos color rosa, muñecas, bebés, cocinitas, entre otros artículos ‘propios’ de mujer.

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Por otro lado en el apartado de niños se ofertan cosas como pistas de carreras, automóviles pequeños, motocicletas, entre otras cosas cuyas tonalidades son azules, verdes, rojas y amarillas.

Algo similar ocurre al acercarse hasta jugueterías en las que los diferentes colores con los que se distinguen los juguetes de niños y niñas predominan según la distribución del sitio para separar los juguetes propios de cada sexo.

Según la psicóloga Paola Granados que una niña reciba cocinas, bebés, cunitas o carreolas y un niño automóviles, escritorios y herramientas, sí predispone al menor de edad a asumir desde una temprana edad los roles de género impuestos.

¿Qué hace la industria para acabar con los estereotipos de género?

Aunque las empresas que ofertan juguetes en esta y otras temporadas si segmentan el contenido según apreciaciones sexistas, hay empresas que buscan erradicar este tipo de conductas perjudiciales.

La empresa Tiendeo, una página que agrupa el contenido de los catálogos y folletos de pequeños, medianos y grandes comercios para ofrecer de manera sencilla y cómodas las promociones y ofertas vigentes de diversos negocios, trata de cambiar el paradigma al momento de ofertar juguetes.

Según Tiendeo tras un análisis 3 de cada 10 catálogos digitales de juguetes comienzan a ser inclusivos respecto al género de los juguetes, y seis de cada 10 poseen un contenido neutro.

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En los catálogos es más frecuente encontrar una oferta más variada que integra imágenes o fotografías donde indistintamente niños y niñas usan juguetes de todo tipo.

Sin embargo, en el análisis Tiendeo encontró que los colores rosa, como distintivo para niñas, y azul, como color característico para niños, sigue estando presente tanto en los catálogos como en los juguetes para marcar las diferencias y hacer proliferar el sexismo.